Síntomas de ansiedad
La prevalencia del trastorno depresivo mayor (TDM) es de aproximadamente un 6% al año en todo el mundo, con una prevalencia a lo largo de la vida del 20%,1 lo que hace que el TDM sea uno de los problemas de salud mental más comunes. Los subtipos específicos de depresión tienen implicaciones terapéuticas y pronósticas e incluyen la depresión melancólica (melancolía), la depresión con rasgos atípicos, el TDM con rasgos psicóticos, el TDM con catatonia y el TDM con angustia.1-4 El TDM es refractario en aproximadamente el 15% de los pacientes y recurrente en aproximadamente el 35% de los pacientes, y el riesgo de recurrencia aumenta con cada episodio adicional de depresión mayor.1-5
La angustia requiere que al menos dos de las siguientes características estén presentes la mayor parte de los días de un episodio de TDM: sensación de estar “en tensión”, inquietud inusual, dificultad para concentrarse debido a la preocupación, miedo a que ocurran cosas horribles y preocupación por perder el autocontrol.1-4 El TDM con angustia se caracteriza por la depresión causada por una ansiedad implacable y provocará más ansiedad, formando un círculo vicioso.1 -4 Las enfermedades crónicas se asocian con la ansiedad y la depresión.6,7 El TDM y la ansiedad se asocian con afecciones psicosomáticas, como el síndrome de la boca ardiente.8 En los meses que preceden al episodio de TDM, los síntomas prodrómicos pueden incluir ansiedad, ataques de pánico y fobias.3 La angustia ansiosa se asocia con una mayor probabilidad de informar de pensamientos suicidas y una menor respuesta a los antidepresivos tradicionales.1-4
¿Qué medicamentos ayudan a combatir el estrés y la ansiedad?
Tipos de medicamentos contra la ansiedad (benzodiacepinas)
Todas las benzodiacepinas actúan de la misma manera; sin embargo, la intensidad y la duración de sus efectos varían. Las benzodiacepinas más utilizadas para tratar los trastornos de ansiedad son el clonazepam (Rivotril)*, el alprazolam (Xanax) y el lorazepam (Ativan).
¿Qué fármaco es el más recetado para la ansiedad?
Las benzodiacepinas (también conocidas como tranquilizantes) son el tipo de medicamento más recetado para la ansiedad. Fármacos como el Xanax (alprazolam), el Klonopin (clonazepam), el Valium (diazepam) y el Ativan (lorazepam) actúan con rapidez y suelen aliviar la ansiedad en un plazo de 30 minutos a una hora.
Fármacos para el estrés
DiagnósticoPuede empezar por acudir a su médico de cabecera para averiguar si su ansiedad podría estar relacionada con su salud física. Él o ella puede comprobar si hay signos de una condición médica subyacente que pueda necesitar tratamiento.
Sin embargo, es posible que tenga que consultar a un especialista en salud mental si tiene ansiedad grave. Un psiquiatra es un médico especializado en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades mentales. Un psicólogo y algunos otros profesionales de la salud mental pueden diagnosticar la ansiedad y proporcionar asesoramiento (psicoterapia).
TratamientoLos dos tratamientos principales para los trastornos de ansiedad son la psicoterapia y los medicamentos. Es posible que la combinación de ambos le resulte más beneficiosa. Es posible que tenga que probar y equivocarse para descubrir qué tratamientos funcionan mejor para usted.
La terapia cognitivo-conductual (TCC) es la forma más eficaz de psicoterapia para los trastornos de ansiedad. La TCC, que suele ser un tratamiento a corto plazo, se centra en enseñarle habilidades específicas para mejorar sus síntomas y volver gradualmente a las actividades que ha evitado debido a la ansiedad.
Anti-ansiedad перевод
Las benzodiacepinas son un grupo de medicamentos que pueden ayudar a reducir la ansiedad y facilitar el sueño. También se utilizan como relajantes musculares, para inducir la sedación en intervenciones quirúrgicas y otros procedimientos médicos, y en el tratamiento de las convulsiones y la abstinencia de alcohol. Las benzodiacepinas también se denominan tranquilizantes menores, sedantes o hipnóticos. Son los fármacos psicoactivos más recetados en el mundo.
Varios tipos de ejercicio, como caminar, correr, hacer yoga o tai chi, pueden ayudar, al igual que reducir el estrés en su vida y dedicar tiempo a actividades relajantes como la meditación, la lectura de un libro o un baño caliente. Hablar con un amigo, un familiar o un terapeuta de confianza y resolver los problemas que le preocupan también puede ayudar. Siempre que sea posible, deben probarse primero estos enfoques, antes de las benzodiacepinas. Sin embargo, cuando los enfoques no farmacológicos no son posibles o no ayudan, las benzodiacepinas pueden proporcionar alivio.
Cuando se utilizan adecuadamente, las benzodiacepinas son medicamentos seguros y eficaces. Sin embargo, tienen un potencial de abuso y pueden ser adictivas. Por este motivo, normalmente sólo se recomiendan para un uso a corto plazo u ocasional.
Ataque de ansiedad
La depresión y la ansiedad son dos de los trastornos mentales más comunes en Estados Unidos. Pero, ¿sabía que es frecuente tener depresión y ansiedad al mismo tiempo? Casi el 50% de las personas a las que se les diagnostica depresión también son diagnosticadas con un trastorno de ansiedad, según la Anxiety and Depression Association of America (ADAA).
Si usted o un ser querido recibe este doble diagnóstico, podría preguntarse si eso significa un doble tratamiento. No necesariamente: hay medicamentos que tratan tanto la depresión como la ansiedad. Su proveedor de atención médica trabajará con usted para determinar el plan de tratamiento adecuado para sus necesidades específicas.
La depresión es un trastorno mental que suele identificarse con sentimientos intensos de desesperación, desánimo, inutilidad y tristeza abrumadora. Según la Clínica Cleveland, más del 16% de los estadounidenses sufrirán depresión (a veces denominada trastorno depresivo mayor) en algún momento de su vida. Aunque la mayoría de las personas experimentan sentimientos de tristeza en algún momento, en el caso de la depresión estos sentimientos son prolongados -duran dos semanas o más- y lo suficientemente graves como para afectar a la vida diaria.