Síntomas físicos de la ansiedad
Muchas de las exigencias de la vida pueden causar estrés, sobre todo el trabajo, las relaciones y los problemas de dinero. Y, cuando te sientes estresado, esto puede obstaculizar la resolución de estas exigencias, o incluso puede afectar a todo lo que haces.
Puede sentirse ansioso, irritable o con baja autoestima, y puede tener pensamientos acelerados, preocuparse constantemente o darle vueltas a las cosas en su cabeza. Puede notar que pierde los nervios con más facilidad, que bebe más o que actúa de forma poco razonable.
Una vez que ha pasado la presión o la amenaza, los niveles de la hormona del estrés suelen volver a la normalidad. Sin embargo, si está constantemente estresado, estas hormonas permanecerán en su cuerpo, provocando los síntomas del estrés.
El estrés no es una enfermedad en sí misma, pero puede causar enfermedades graves si no se aborda. Es importante reconocer los síntomas del estrés a tiempo. Reconocer los signos y síntomas del estrés le ayudará a encontrar formas de afrontarlo y le evitará adoptar métodos de afrontamiento poco saludables, como beber o fumar.
Hay poco que se pueda hacer para prevenir el estrés, pero hay muchas cosas que se pueden hacer para gestionarlo de forma más eficaz, como aprender a relajarse, hacer ejercicio regularmente y adoptar buenas técnicas de gestión del tiempo.
Qué es el estrés
Esta sección ofrece información sobre los trastornos de ansiedad. Explica los síntomas, los tratamientos y la forma de controlar un trastorno de ansiedad. Esta sección está dirigida a las personas con trastornos de ansiedad. Y a sus cuidadores, familiares y amigos.
Todos tenemos a veces sentimientos de ansiedad, preocupación y miedo. Pueden ser respuestas normales a determinadas situaciones. Por ejemplo, puede preocuparse por una entrevista de trabajo o por pagar una factura a tiempo. Estos sentimientos pueden hacerte consciente de los riesgos y de lo que debes hacer en una situación difícil o peligrosa. Esta reacción se conoce como “lucha o huida”.
El cerebro responde a una amenaza o peligro liberando hormonas del estrés, como la adrenalina y el cortisol. Aunque el peligro no sea real, estas hormonas provocan los síntomas físicos de la ansiedad. Una vez que la situación amenazante ha cesado, el cuerpo suele volver a la normalidad.
Pero si padeces un trastorno de ansiedad, estas sensaciones de miedo y peligro pueden ser continuas e interrumpir tu rutina diaria mucho después de que la amenaza haya desaparecido. Pueden hacerle sentir que las cosas son peores de lo que realmente son.
Síntomas físicos del estrés
La vida puede ser estresante: puedes sentirte estresado por el rendimiento escolar, por acontecimientos traumáticos (como una pandemia, una catástrofe natural o un acto de violencia) o por un cambio de vida. Todo el mundo siente estrés de vez en cuando.
¿Qué es el estrés? El estrés es la respuesta física o mental a una causa externa, como tener muchos deberes o padecer una enfermedad. Un factor estresante puede ser algo puntual o de corta duración, o puede ocurrir repetidamente durante mucho tiempo.
Si esa ansiedad no desaparece y empieza a interferir en tu vida, podría afectar a tu salud. Podrías tener problemas para dormir, o con tus sistemas inmunológico, digestivo, cardiovascular y reproductivo. También puede correr un mayor riesgo de desarrollar una enfermedad mental, como un trastorno de ansiedad o una depresión. Lea más sobre los trastornos de ansiedad.
Todo el mundo experimenta estrés, y a veces ese estrés puede resultar abrumador. Puede correr el riesgo de padecer un trastorno de ansiedad si siente que no puede controlar el estrés y si los síntomas del mismo:
Desencadenantes de la ansiedad
“La ansiedad es un estado mental-emocional incómodo sobre el futuro”, dice Buttimer. “Queremos previsibilidad y control sobre lo que va a ocurrir en el futuro; la ansiedad se centra excesivamente en los ‘y si'”.
La ansiedad es una parte normal de la vida, pero podrías tener un trastorno de ansiedad si la experimentas con frecuencia, empieza a afectar a tus actividades diarias, es difícil de controlar o parece desproporcionada para una situación.
“Un profesional de la salud mental puede enseñarte técnicas para ayudarte a poner las cosas en perspectiva”, explica Buttimer. “Pueden ofrecerte una visión más objetiva de los acontecimientos de tu vida y ayudarte a distinguir entre la ansiedad normal y las fases extremas de ansiedad”.