Cómo deshacerse del dolor de cuello por estrés
Hay muchos estudios que muestran la conexión entre el dolor de cuello y los síntomas psicológicos como el estrés, la ansiedad y la depresión. En artículos anteriores hemos hablado de la relación entre la depresión y el dolor crónico. El dolor crónico puede llevar a la depresión, que puede llevar a la inactividad, y empeorar el dolor crónico. Ambos pueden provocar una espiral descendente.
La ansiedad y la tensión muscular suelen ir de la mano. Los músculos tensos de la cara, la mandíbula, el cuello, los hombros y la parte superior de la espalda se encuentran a menudo en personas estresadas o ansiosas. La tensión en esta zona puede provocar dolor de cuello. Entonces, ¿es su ansiedad la causa de su dolor de cuello? Puede ser. Pero también podría ser algo en su columna vertebral lo que está creando el problema. Determinar la causa del dolor de cuello no siempre es sencillo.
Sabemos que el estrés y la ansiedad pueden causar tensión muscular en la parte superior del cuerpo, lo que provoca dolor de cuello. Pero las afecciones de la columna vertebral pueden provocar presión sobre los nervios. La presión puede iritar los nervios y enviar señales excesivas a otras zonas del cuerpo. Así, un problema de disco o vértebra en el cuello puede enviar señales a los músculos de los hombros y la parte superior de la espalda. Esto puede provocar espasmos musculares. Con el tiempo, los músculos pueden fatigarse y doler.
Cómo se siente el dolor de cuello por estrés
El estrés provoca muchos problemas diferentes en el cuerpo, y cada persona experimenta el estrés de forma diferente. Cuando se sufre de ansiedad, se somete al cuerpo constantemente a un estrés prolongado, que puede tener efectos tanto inmediatos como duraderos. Cuando tu cuerpo está en modo “lucha o huida”, generalmente significa que está liberando hormonas del estrés (especialmente adrenalina y cortisol) que pueden crear tensión muscular y una sensación general de malestar. Esto no hace más que aumentar el estrés y/o la ansiedad existentes.
El dolor de cuello es uno de los síntomas físicos más comunes de la ansiedad persistente. No se da en todo el mundo, pero una parte importante de los afectados experimenta algún grado de dolor de cuello que puede ir desde ligeramente irritante hasta grave.
Hay varios factores que pueden aumentar la probabilidad de sufrir dolor de cuello. Si el dolor de cuello es intenso o impide su modo de vida, se aconseja que visite a su médico de cabecera. Otros problemas, como el latigazo cervical, una hernia discal, la artritis, etc., pueden presentarse como dolor de cuello, pero requieren una intervención médica. Como siempre, si su dolor es repentino y extremo, busque tratamiento médico lo antes posible para disminuir la posibilidad de daños mayores.
¿Puede el estrés causar espondilosis cervical?
La Asociación Americana de Psicología informa de que el 50% de los estadounidenses sufren estrés crónico. También informan de que una de cada 10 personas sufre dolor de cuello u hombros. Entonces, ¿cuál es la conexión aquí?
Los estudios demuestran que los niveles elevados de estrés emocional o psicológico pueden contribuir al dolor físico crónico, sobre todo en el cuello y los hombros. Este tipo de dolor crónico se ha relacionado posteriormente con la irritabilidad, la fatiga e incluso la depresión.
El estrés se encuentra a diario en la vida, ya sea de carácter personal o profesional. El cuerpo está preparado para manejar el estrés en pequeñas rachas. Es cuando hay problemas continuos que nos gravan mentalmente cuando nuestro cuerpo físico empieza a actuar. Los músculos se tensan y empiezan a doler las articulaciones.
Dolor de cuello frontal por estrés
La ansiedad puede causar una gran cantidad de síntomas extremadamente inusuales. Muchos de estos síntomas son similares a los de las condiciones médicas reales, por lo que pueden pasar desapercibidos o contribuir a aumentar la ansiedad. Por supuesto, dado que están relacionados con afecciones médicas reales, siempre hay que acudir al médico. Esto es especialmente cierto si el síntoma con el que estás luchando comprende ganglios linfáticos inflamados.
La inflamación de los ganglios linfáticos suele ser el resultado de afecciones médicas como las infecciones. También hay enfermedades más graves que pueden estar relacionadas con la inflamación de los ganglios linfáticos. Habla con un médico si te preocupa. Pero ten en cuenta que, en raras ocasiones, la ansiedad puede provocar la sensación de que tienes los ganglios linfáticos o las glándulas hinchadas. Para las personas con ansiedad por la salud, esta sensación puede ser increíblemente aterradora.
Curiosamente, no está claro si la ansiedad o el estrés causan realmente la inflamación de los ganglios linfáticos. Sin embargo, lo que está claro es que la ansiedad hace que las personas se sientan como si tuvieran los ganglios linfáticos inflamados, y esto puede conducir a una mayor ansiedad sobre su salud en general.