Incapacidad para trabajar debido a la salud mental
Descargo de responsabilidad sobre el contenido El contenido de este sitio web se proporciona únicamente con fines informativos. La información sobre una terapia, un servicio, un producto o un tratamiento no respalda en modo alguno dicha terapia, servicio, producto o tratamiento y no pretende sustituir el consejo de su médico u otro profesional sanitario registrado. La información y los materiales contenidos en este sitio web no pretenden constituir una guía completa sobre todos los aspectos de la terapia, el producto o el tratamiento descritos en el sitio web. Se insta a todos los usuarios a que busquen siempre el asesoramiento de un profesional de la salud registrado para obtener un diagnóstico y respuestas a sus preguntas médicas y para determinar si la terapia, el servicio, el producto o el tratamiento concretos descritos en el sitio web son adecuados en sus circunstancias. El Estado de Victoria y el Departamento de Salud no asumirán ninguna responsabilidad por la confianza depositada por cualquier usuario en los materiales contenidos en este sitio web.
¿Pueden los profesores tomarse una licencia por estrés?
El miedo es una emoción humana que se desencadena al percibir una amenaza. Es un mecanismo básico de supervivencia que indica a nuestro cuerpo que responda al peligro con una respuesta de lucha o huida. Como tal, es una parte esencial para mantenernos a salvo.
Sin embargo, cuando las personas viven con miedo constante, ya sea por los peligros físicos de su entorno o por las amenazas que perciben, pueden experimentar impactos negativos en todos los ámbitos de su vida e incluso quedar incapacitadas.
Nos damos cuenta y almacenamos todos los detallesEl cerebro almacena todos los detalles que rodean al peligro: las imágenes, los sonidos, los olores, la hora del día, el tiempo, etc. Estos recuerdos suelen ser muy duraderos, aunque también pueden estar fragmentados.
Los detalles del suceso pueden desencadenar el miedo más adelanteLas imágenes, los sonidos y otros detalles contextuales de un suceso temible pueden hacernos recordar, o pueden hacernos sentir miedo sin saber conscientemente por qué. Dado que estas señales se asocian a un peligro anterior, el cerebro puede verlas como un indicador de amenaza.
En casos graves, esto puede dar lugar al trastorno de estrés postraumático (TEPT). Por ejemplo, un soldado que ha sufrido un bombardeo en un día de niebla puede entrar en pánico cuando el tiempo se vuelve brumoso, sin saber por qué.
Síntomas de estrés
Jennifer trabaja el lunes, luego coge un día de baja por enfermedad el martes, después tiene un día de descanso programado el miércoles (y sigue enferma) y otro día de baja por enfermedad el jueves. Su empleador puede pedirle un justificante a Jennifer, ya que ha estado enferma tres días seguidos.
Holly trabaja de lunes a viernes, está enferma el lunes y el martes, y el miércoles llama por teléfono a su empleador para comunicarle que volverá a estar de baja. El empresario de Holly le dice que: Si el empresario de Holly le hubiera pedido el certificado cuando llamó por teléfono para decir que estaba enferma el martes, su empleador habría tenido que cubrir el coste. La política del lugar de trabajo de Holly establece que las bajas por enfermedad se registran y se deducen en medios días; si Holly acudiera al trabajo a la hora de comer el miércoles (y sólo se tomara medio día de baja por enfermedad) al encontrarse mucho mejor, habría estado enferma menos de tres días, por lo que su empleador tendría que cubrir el coste de cualquier certificado médico que le pidiera.
Pago de la baja por estrés
Un empresario no está obligado a contratar o mantener a personas en puestos de trabajo que no puedan desempeñar, ni a emplear a personas que supongan una “amenaza directa” para la seguridad (un riesgo significativo de daño sustancial para uno mismo o para otros). Pero un empresario no puede basarse en mitos o estereotipos sobre tu estado de salud mental para decidir si puedes realizar un trabajo o si supones un riesgo para la seguridad. Antes de que un empresario pueda rechazar su solicitud de empleo basándose en su estado de salud, debe tener pruebas objetivas de que no puede desempeñar sus funciones o de que supondría un riesgo importante para la seguridad, incluso con una adaptación razonable (véase la pregunta 3).
También es posible que tenga que hablar de su estado de salud para establecer su derecho a recibir prestaciones en virtud de otras leyes, como la FMLA. Si habla de su estado de salud, la empresa no puede discriminarle (véase la pregunta 5) y debe mantener la confidencialidad de la información, incluso frente a sus compañeros de trabajo. (Si desea hablar de su estado de salud con sus compañeros de trabajo, puede optar por hacerlo).
Puede obtener una adaptación razonable para cualquier enfermedad mental que, de no ser tratada, “limitaría sustancialmente” su capacidad de concentración, de relacionarse con los demás, de comunicarse, de comer, de dormir, de cuidar de sí mismo, de regular sus pensamientos o emociones, o de realizar cualquier otra “actividad vital importante”. (No es necesario que abandone realmente el tratamiento para obtener la adaptación).