Sensación de ansiedad constante
El estrés puede tener un impacto dramático en nuestra salud física, desencadenando todo tipo de síntomas y empeorando muchas condiciones médicas. Un problema que a menudo se atribuye al estrés es el vértigo, pero ¿es realmente cierto que estar estresado puede provocar este síntoma?
El término vértigo se refiere a la sensación de que usted o su entorno están girando o inclinándose, aunque en realidad todo esté inmóvil. Puede hacer que te sientas enfermo, mareado y desequilibrado. Los síntomas pueden durar sólo unos segundos, pero pueden durar varios días.
El vértigo es un síntoma que puede producirse por muchas razones diferentes. A veces puede estar relacionado con una enfermedad subyacente, como una arritmia cardíaca o problemas de presión arterial. También puede ser causado por condiciones que afectan a las estructuras del equilibrio en el oído interno, incluyendo infecciones y la enfermedad de Meniere. Sin embargo, no siempre hay una causa física para el vértigo. A veces parece estar relacionado con nuestras emociones.
Las causas físicas del vértigo pueden desencadenar este síntoma al interferir con los órganos del equilibrio en el oído interno o al afectar al suministro de sangre al cerebro, lo que puede hacer que te sientas aturdido y mareado. Los desencadenantes emocionales pueden provocar el vértigo de una forma ligeramente diferente.
Vértigo y mareos
Sentirse mareado puede ser fácilmente uno de los síntomas más perturbadores de la ansiedad. Es posible que se sienta aturdido o “mareado”. Puede sentir que necesita sentarse o tumbarse y, en algunos casos, cambiar de posición no detiene los síntomas. Para otros, el mareo puede ir acompañado de otros síntomas que pueden hacerle creer que su vida corre peligro.
Los mareos pueden ser un síntoma muy grave de otros problemas, como presión arterial baja, anemia, levantarse demasiado rápido o enfermedades más graves como la esclerosis múltiple. Si es la primera vez que experimenta un mareo -especialmente si el mareo es severo- es una buena idea visitar a su proveedor de atención primaria.
Los mareos inducidos por la ansiedad no suelen durar mucho, aunque pueden fluctuar con bastante rapidez en medio de un momento de ansiedad intensa. Si los mareos le impiden estar de pie o duran más de unos minutos sin resolverse, lo mejor es que se ponga en contacto con su médico de cabecera, porque puede que no estén causados simplemente por la ansiedad.
Ansiedad por el mareo
Nota: Si experimenta ansiedad y mareos, éstos podrían ser un síntoma de una condición de salud física, por lo que siempre se recomienda buscar consejo médico para determinar su causa.
En algunas personas, la ansiedad y los mareos pueden intensificarse hasta el punto de sufrir ataques de pánico. Los síntomas de ansiedad, mareo y vértigo variarán en intensidad de una semana a otra. Algunos días la sensación puede ser especialmente intensa, y otros puede ser mucho más soportable.
Es posible que haya comprobado que su ansiedad y sus mareos aumentan cuando se encuentra en escenarios que teme, como las multitudes o el transporte público. Los mareos, cuando se relacionan con la ansiedad, suelen ir acompañados de una sensación de aturdimiento o de que te vas a desmayar. Para saber si los mareos están causados por la ansiedad, se deben presentar otros síntomas de ansiedad, como miedo, pensamientos acelerados, aumento del ritmo cardíaco e incapacidad para concentrarse.
Si experimenta mareos con regularidad, o lo hace a causa de un problema de salud como la tensión arterial baja, la anemia o un trastorno vestibular como el vértigo posicional paroxístico (VPPB), la laberintitis o la neuritis vestibular (también conocidos como trastornos del equilibrio), es posible que haya empezado a sentirse ansioso por uno de los siguientes motivos:
Vértigo por estrés
La ansiedad es una parte normal de la vida, y los mareos son un síntoma común. La mayoría de las personas han experimentado mareos inducidos por la ansiedad en algún momento, pero algunas personas sufren ataques intermitentes o crónicos de ansiedad y mareos. La ansiedad persistente con mareos suele estar relacionada con un trastorno de ansiedad.
Los mareos también pueden provocar ansiedad, especialmente cuando se producen con regularidad e interfieren con el funcionamiento normal. Muchos casos de mareos se desencadenan por movimientos específicos, pero algunas personas tienen mareos inexplicables. En cualquiera de los dos casos, las personas pueden sentirse muy ansiosas al marearse.
Es importante destacar que la ansiedad y los mareos pueden reforzarse mutuamente. Por ejemplo, si está ansioso por marearse, su riesgo de marearse aumenta. Cuando se marea, aumenta su nivel de ansiedad. Con el tiempo, este ciclo puede volverse debilitante y aumentar el riesgo de desarrollar nuevos trastornos psiquiátricos y empeorar los existentes, por lo que es importante aprender a controlar la ansiedad y los mareos.
Las personas que experimentan ansiedad recurrente o crónica pueden padecer un trastorno de ansiedad. Según el Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH), alrededor del 20% de los adultos cumplen los criterios de un trastorno de ansiedad, con un ligero aumento en las mujeres (~23%). Existen varios tipos de trastornos de ansiedad, entre ellos: