Efectos del sufrimiento fetal en el bebé
Cada vez más investigaciones indican que el estrés materno durante el embarazo ejerce una fuerte influencia en el desarrollo del feto (Van den Bergh et al., 2017). Estudios recientes subrayan la influencia a largo plazo en una variedad de dominios de desarrollo en la descendencia, como el funcionamiento metabólico y el desarrollo cognitivo y emocional (para una revisión, véase Beijers et al., 2014). Sin embargo, hasta la fecha, los mecanismos a través de los cuales el estrés materno prenatal puede afectar al feto aún no están del todo aclarados (Hocher, 2014). Entre otros, se discuten las influencias ambientales prenatales, conocidas como programación fetal (Seckl, 2004), los factores genéticos (Hannigan et al., 2018), así como los factores ambientales posparto (Graignic-Philippea et al., 2014; Mughal et al., 2018).
Hasta la fecha, el estrés materno prenatal se define de forma muy amplia, incluyendo el malestar psicológico como la ansiedad o los síntomas depresivos y los acontecimientos vitales, por ejemplo, traumas, pérdidas o desastres naturales. En este estudio nos centramos en el estrés emocional durante el embarazo. Esto se evaluó retrospectivamente con un cuestionario en el período posparto temprano, que incluía ítems relativos a la experiencia materna de ansiedad, tristeza, alegría, estrés y tensión general (Mohler et al., 2006).
Signos de sufrimiento fetal durante el parto
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Suelo fetal
Grupo de control: 18Guardino et al. [59]Programa de prácticas de conciencia plena (MAPS) de 6 semanasMujeres embarazadas de 10 a 25 semanas de gestación con un embarazo único, que experimentan altos niveles de estrés percibido o ansiedad específica del embarazoMejoras significativas en la ansiedad estatal (subescala estatal del STAI), el estrés percibido (PSS) y la conciencia plena (FFMQ) para el grupo de intervención. Reducciones significativas en la ansiedad relacionada con el embarazo (Pregnancy Related Anxiety, PRA) y en la ansiedad específica del embarazo (Pregnancy Specific Anxiety, PSA) en el grupo de intervenciónGrupo de intervención: 24
Grupo de control: 23Dimidjian et al. [60]Terapia cognitiva basada en Mindfulness de 8 semanas – Depresión prenatal (MBCT-PD)Mujeres embarazadas de hasta 32 semanas de gestación que cumplen los criterios de trastorno depresivo mayor (TDM) previo)Mejoras significativas en los síntomas depresivos (Escala de depresión posparto de Edimburgo, EPDS)49Byrne et al. [61]Educación para el parto basada en la atención plena durante 8 semanas (MBCE)Embarazadas nulíparas y sanas con embarazos únicos de entre 18 y 28 semanas de gestaciónMejoras significativas en la autoeficacia para el parto y en las expectativas de resultados del parto (Inventario de autoeficacia para el parto, CBSI) y disminución del miedo al parto (Cuestionario de expectativas de parto de Wijma, WDEQ)12Muzik et al. [62]10 Semanas de yoga de atención plena (M-Yoga)Embarazadas primíparas de más de 26 semanas de gestación que no tomaban medicación psicotrópica, con una puntuación superior a 9 en el test de depresión EPDSReducción significativa de los síntomas depresivos (Inventario de Depresión de Beck-segunda edición, BDI-II y EPDS). Mejoras significativas en la atención plena (FFMQ-Revised) y en el apego materno-fetal (Maternal Fetal Attachment Scale, MFAS)18Woolhouse et al. [63]Programa “MindBabyBody” de 6 semanasEstudio no aleatorio: mujeres embarazadas identificadas como en riesgo de estrés perinatal, depresión o ansiedad
Prueba de esfuerzo fetal
Lamentablemente, muchas personas confunden el término “sufrimiento fetal” con una afección diferente, la asfixia del parto, en la que el bebé no tiene un suministro de oxígeno adecuado. Aunque la asfixia al nacer es muy grave y suele provocar sufrimiento, hay muchos otros problemas que no tienen nada que ver con el suministro de oxígeno y que también pueden dar lugar a síntomas de sufrimiento fetal.
Como señala la Asociación Americana del Embarazo, la confusión sobre el significado de “sufrimiento fetal” ha llevado a diagnósticos inexactos y a un tratamiento inadecuado, que puede ser mortal tanto para la madre como para el niño.
Algunas madres también han informado de una sensación de que “algo no parece estar bien”. Aunque, en la mayoría de los casos, estas ansiedades por sí solas no son síntoma de sufrimiento fetal, es posible que quieras visitar a tu médico para que te tranquilice.
Es comprensible que los padres estén ansiosos por conocer los posibles efectos del sufrimiento en el bebé. Sin embargo, recuerda que el sufrimiento fetal es un síntoma de una causa subyacente. Los efectos dependerán de la condición que cause el sufrimiento.
La forma más habitual de monitorización es la monitorización de la frecuencia cardíaca fetal (FCF). Mediante la monitorización de la FCF, los profesionales sanitarios pueden detectar problemas relacionados con la frecuencia y el ritmo cardíacos, los niveles de oxígeno y muchas otras causas comunes de sufrimiento fetal. La ecografía y otras técnicas de imagen o monitorización también pueden ser adecuadas.