Tipos de dolor cervical
Hay muchos tipos diferentes de dolores de cabeza. Aunque no todos los dolores de cabeza son iguales, todos tienen al menos una cosa en común: causan dolor. Pero muchos dolores de cabeza también provocan otros síntomas no deseados, como náuseas y vómitos. Aunque la mayoría de las cefaleas no provienen del cuello, este artículo se refiere a una cefalea cervicogénica que, por definición, es cualquier dolor de cabeza provocado por el cuello.
Si usted sufre de dolores de cabeza frecuentes y dolorosos que no parecen aliviarse con los medicamentos típicos, puede estar experimentando cefaleas cervicogénicas. Causadas por el dolor referido del cuello, estas cefaleas se sienten en la región oculofrontal-temporal de la cabeza, que se encuentra detrás de los ojos, las sienes y la parte posterior de la cabeza. Estos dolores de cabeza pueden variar desde pequeños brotes de dolor hasta una pulsación continua; los pacientes también pueden experimentar dolor y rigidez en el cuello, que puede llegar a ser tan intenso que no pueden moverse.
Como el cerebro no siempre es muy hábil para detectar la localización exacta del dolor de cuello, a veces puede confundir el dolor en la columna cervical superior (cuello) con un dolor de cabeza. El dolor puede verse agravado por una mala postura, una lesión anterior o actual, problemas en los discos de la columna vertebral, movimientos repetitivos del cuello y problemas para dormir. Cualquier tensión excesiva en el cuello puede provocar dolores de cabeza cervicogénicos.
Protocolo de cefalea cervicogénica
Los trastornos cervicales implicados como causas de cefalea se dividen en dos grupos: a) aquellos en los que las lesiones cervicales son inequívocamente demostrables, y en los que el tratamiento de esas lesiones ayuda a la cefalea; estos son ampliamente aceptados como causas de cefalea, e incluyen: los trastornos congénitos y adquiridos de la unión cráneo-vertebral, la artritis reumatoide y la espondilitis anquilosante de la columna cervical superior, y la disección o el traumatismo de las arterias carótidas o vertebrales; b) aquellos en los que el trastorno del cuello es banal o no es objetivamente demostrable, y que rara vez mejoran tras el tratamiento del cuello; no están ampliamente aceptadas como causas de cefalea; incluyen el síndrome del latigazo cervical, el síndrome de hipomovilidad segmentaria, el síndrome simpático cervical posterior, la migraña cervical, la cefalea del tercer nervio occipital y la cefalea cervicogénica. Las características de una cefalea que sugieren su origen cervical son 1) aparición brusca tras un movimiento excesivo y repentino de la cabeza; 2) dolor unilateral suboccipital u occipital persistente; 3) reproducción consistente por movimientos del cuello y por nada más; 4) posturas anómalas de la cabeza y el cuello; 5) limitación dolorosa significativa del movimiento de la columna cervical superior; 6) movilidad anómala en la unión cráneo-vertebral; 7) anomalías sensoriales C2 o signos de la médula inferior o de la médula superior.
Dolor de cuello y de cabeza
Las cefaleas cervicogénicas y las migrañas se confunden a veces porque tienen algunos puntos en común. Ambas pueden ser debilitantes para el paciente. Sin embargo, existen importantes distinciones entre ambas y las opciones de tratamiento serán diferentes.
La cefalea cervicogénica es una forma de dolor referido, lo que significa que el dolor de cabeza es el resultado de un problema en el cuello, o columna cervical. El cuello puede estar dañado por un accidente o un traumatismo. Las vértebras de la columna cervical pueden haberse degenerado con el tiempo, provocando la compresión de los discos. Los nervios de la columna cervical que se han pinchado también pueden causar cefaleas cervicogénicas.
La migraña se considera un trastorno de dolor de cabeza primario. Las migrañas suelen afectar a un lado de la cabeza y pueden ser de moderadas a graves. El dolor pulsátil de una migraña puede ir acompañado de otros síntomas como náuseas, mareos, vómitos, visión borrosa, aura y sensibilidad a la luz, los sonidos o el olor. Una migraña puede durar desde unas horas hasta varios días. Las causas de las migrañas suelen ser desconocidas, aunque a veces son hereditarias. Algunos migrañosos pueden notar ciertos desencadenantes de las migrañas, como los alimentos, la fatiga y los cambios de tiempo.
Neuralgia occipital
Por desgracia, el dolor de cuello no siempre se queda en un solo punto, lo que ya sería bastante malo. Es posible que ya sepa que el dolor de cuello puede llegar a la cabeza, a los hombros e incluso a los brazos. Pero, ¿a qué se debe esto?
El Dr. Patrick Doherty es un neurocirujano certificado que puede responder a esa pregunta. El Dr. Doherty dirige el equipo de Yale Neurosurgery New London en New London Connecticut. Es muy respetado y ampliamente apreciado por su habilidad médica y su experiencia en el tratamiento de afecciones de la columna vertebral difíciles de manejar, incluidas las que provocan dolor de cuello.
La respuesta sencilla a por qué el dolor de cuello provoca dolor de cabeza es “los nervios”. Más concretamente, el dolor procede del modo en que las fibras nerviosas sensoriales que transmiten mensajes desde el cuello interactúan con las fibras nerviosas sensoriales que llevan las señales de dolor desde la cabeza y la cara hasta el cerebro. Esta interacción puede dar lugar a la transferencia (derivación) de las sensaciones de dolor del cuello a la cabeza.
Las cefaleas cervicogénicas pueden ser difíciles de diagnosticar, ya que los síntomas se asemejan a los de otras cefaleas, incluidas las migrañas. De hecho, muchas cefaleas crónicas incluyen el dolor de cuello como síntoma común.