Señales de depresión de alto funcionamiento que no debes ignorar
Amy Morin, LCSW, es la editora en jefe de Verywell Mind. También es psicoterapeuta, autora del exitoso libro “13 Things Mentally Strong People Don’t Do” (13 cosas que no hacen las personas mentalmente fuertes) y presentadora del podcast The Verywell Mind.
Los artículos de Verywell Mind son revisados por médicos certificados y profesionales de la salud mental. Los revisores médicos confirman que el contenido es exhaustivo y preciso, y que refleja las últimas investigaciones basadas en la evidencia. El contenido se revisa antes de su publicación y en caso de actualizaciones sustanciales. Más información.
Hay muchos conceptos erróneos sobre el aspecto de la depresión. Puede imaginarse a alguien que está demasiado angustiado para salir de la cama. O puede imaginar a alguien que no es capaz de trabajar o realizar actividades debido a su bajo estado de ánimo.
Pero esto no significa que no se sientan deprimidos. Algunas de estas personas pueden meterse en la cama en cuanto llegan a casa del trabajo. O puede que se sienten en el sofá todas las tardes y lloren toda la noche. Puede que simplemente se les dé bien ocultar su depresión a los demás.
El DSM-5 (la versión más reciente del manual que utilizan los médicos para ver si los pacientes cumplen los criterios de una enfermedad mental específica) incluye una afección denominada trastorno depresivo persistente. Aunque hay varios tipos de depresión, las personas que parecen tener un alto nivel de funcionamiento pueden tener un trastorno depresivo persistente.
La enfermedad invisible de la depresión “de alto funcionamiento”
La discapacidad cotidiana de la depresión La depresión es una enfermedad clínicamente heterogénea, con una variedad de síntomas ampliamente subestimada que abarca dominios emocionales, físicos y cognitivos.1,2 La disfunción en todos los dominios de la cognición en la depresión puede contribuir a una mayor discapacidad funcional en la vida cotidiana.3 De hecho, la depresión está clasificada como la principal causa de discapacidad en todo el mundo, y es también un importante contribuyente a la carga global de la enfermedad.4 La discapacidad funcional en las actividades cotidianas es una de las consecuencias más importantes de la depresión, aunque también es una de las menos conocidas.3
La depresión afecta a las personas en el lugar de trabajo, aumentando tanto el presentismo (pérdida de productividad debido a la asistencia a pesar de la enfermedad) como el absentismo (falta de asistencia al trabajo debido a la enfermedad), que en los casos graves puede provocar el cese del empleo.5 La capacidad para mantener las responsabilidades domésticas y gestionar las finanzas también puede disminuir, además de una reducción en la cantidad y la calidad de las relaciones sociales y los vínculos comunitarios.3
Reflexiones de un depresivo funcional: Liane Hansen en
Amy Morin, LCSW, es la editora en jefe de Verywell Mind. También es psicoterapeuta, autora del bestseller “13 Things Mentally Strong People Don’t Do” (13 cosas que no hacen las personas mentalmente fuertes) y presentadora del podcast The Verywell Mind.
Los artículos de Verywell Mind son revisados por médicos certificados y profesionales de la salud mental. Los revisores médicos confirman que el contenido es exhaustivo y preciso, y que refleja las últimas investigaciones basadas en la evidencia. El contenido se revisa antes de su publicación y en caso de actualizaciones sustanciales. Más información.
Hay muchos conceptos erróneos sobre el aspecto de la depresión. Puede imaginarse a alguien que está demasiado angustiado para salir de la cama. O puede imaginar a alguien que no es capaz de trabajar o realizar actividades debido a su bajo estado de ánimo.
Pero esto no significa que no se sientan deprimidos. Algunas de estas personas pueden meterse en la cama en cuanto llegan a casa del trabajo. O puede que se sienten en el sofá todas las tardes y lloren toda la noche. Puede que simplemente se les dé bien ocultar su depresión a los demás.
El DSM-5 (la versión más reciente del manual que utilizan los médicos para ver si los pacientes cumplen los criterios de una enfermedad mental específica) incluye una afección denominada trastorno depresivo persistente. Aunque hay varios tipos de depresión, las personas que parecen tener un alto nivel de funcionamiento pueden tener un trastorno depresivo persistente.
6 formas de afrontar la depresión de alto funcionamiento
La depresión de alto funcionamiento, o funcional, es un término que se ha popularizado en los últimos años y que se utiliza para describir una condición que antes se conocía como distimia, y que ahora se conoce como Trastorno Depresivo Persistente: un tipo de depresión que se caracteriza por un estado de ánimo deprimido durante la mayor parte del día, y en más días de los previstos. Entre los síntomas depresivos más comunes se encuentran el exceso de comida o la falta de apetito, el insomnio o el dormir demasiado, la baja energía o la fatiga, la baja autoestima o la baja imagen de sí mismo, la incapacidad de concentrarse, la dificultad para tomar decisiones y los sentimientos generales de desesperanza. Una persona que sufre distimia puede experimentar la mayoría de estos síntomas o sólo algunos, por lo que puede ser difícil de precisar.
Las personas con depresión de alto funcionamiento también suelen ser pesimistas de alto rendimiento, lo que puede enmascarar la enfermedad y ser considerada como negatividad general, en lugar de algo más grave. Las personas con depresión de alto funcionamiento suelen ser negativas o pesimistas en su visión de las experiencias, así como de sí mismas, luchan con la duda sobre sí mismas, experimentan irritabilidad, se preocupan o se sienten culpables en exceso y, en general, pueden ser las personas más propensas a darle más importancia de la necesaria a las cosas. Los perfeccionistas pueden ser a menudo un grupo de personas con depresión de alto funcionamiento.