Ejercicios de ansiedad
¿Tienes ansiedad? ¿Ha intentado todo para superarla, pero no deja de aparecer? ¿Quizá creía que la había superado, pero los síntomas vuelven a aparecer con fuerza? Sean cuales sean sus circunstancias, la ciencia puede ayudarle a vencer la ansiedad para siempre.
La ansiedad puede presentarse en forma de miedo, inquietud, incapacidad para concentrarse en el trabajo o la escuela, dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido por la noche, o irritarse con facilidad. En situaciones sociales, puede dificultar la conversación con los demás; puede sentir que le juzgan constantemente, o tener síntomas como tartamudeo, sudoración, rubor o malestar estomacal.
Puede aparecer de repente como un ataque de pánico, cuando los picos repentinos de ansiedad te hacen sentir que estás a punto de tener un ataque al corazón, volverte loco o perder el control. O puede estar presente todo el tiempo, como en el caso del trastorno de ansiedad generalizada, cuando la preocupación difusa y omnipresente te consume y miras al futuro con temor.
La mayoría de la gente la experimenta en algún momento, pero si la ansiedad empieza a interferir en su vida, su sueño, su capacidad para entablar relaciones o su productividad en el trabajo o los estudios, es posible que sufra un trastorno de ansiedad. Las investigaciones demuestran que, si no se trata, la ansiedad puede conducir a la depresión, la muerte prematura y el suicidio. Y aunque efectivamente puede provocar estas graves consecuencias para la salud, la medicación que se prescribe para tratar la ansiedad no suele funcionar a largo plazo. Los síntomas suelen reaparecer y se vuelve al punto de partida.
Trastorno de ansiedad
Evitar los miedos sólo los hace más temibles. Sea cual sea tu miedo, si te enfrentas a él, debería empezar a desaparecer. Si un día tienes pánico a entrar en un ascensor, por ejemplo, lo mejor es que vuelvas a entrar en él al día siguiente.
Trata de imaginar lo peor que puede pasar: tal vez que te entre el pánico y te dé un ataque al corazón. Después, intenta pensar en que te va a dar un ataque al corazón. No es posible. El miedo huirá cuanto más lo persigas.
A veces ayuda desafiar los pensamientos de miedo. Por ejemplo, si tienes miedo de quedarte atrapado en un ascensor y asfixiarte, pregúntate si alguna vez has oído que esto le haya ocurrido a alguien. Pregúntate qué le dirías a un amigo que tuviera un miedo similar.
Tómate un momento para cerrar los ojos e imaginar un lugar seguro y tranquilo. Puede ser una imagen de ti paseando por una bonita playa, o acurrucado en la cama con el gato a tu lado, o un recuerdo feliz de la infancia. Deja que los sentimientos positivos te tranquilicen hasta que te sientas más relajado.
También puede probar un enfoque de terapia cognitivo-conductual por teléfono, con un servicio como NHS Living Life. Si quiere saber más sobre este servicio con cita previa, puede visitar la página web de Living Life o llamar al 0800 328 9655 (de lunes a viernes, de 13 a 21 horas).
Cómo afrontar los ataques de ansiedad
La temporada de viajes de verano está a punto de comenzar. Decenas de turistas preparan con entusiasmo su equipaje y consultan páginas web o folletos brillantes mientras anticipan sus próximas vacaciones. Aunque la idea de conocer nuevos lugares o de relajarse en lugares acogedores y familiares resulta atractiva para la mayoría de las personas, hay quienes encuentran aterradora la idea de viajar. Es difícil entusiasmarse con nuevas aventuras cuando la mera idea de emprender un viaje provoca ansiedad.
Para algunos, el mero hecho de salir de su casa y de su entorno familiar puede ser suficiente para provocar ansiedad al viajar, especialmente si se sufren ataques de pánico. Conocer gente nueva o experimentar nuevos alimentos también puede hacer que la gente se sienta insegura, además de preocuparse por cómo reaccionará emocionalmente puede desencadenar la ansiedad.
Si ha probado algunos de estos consejos en viajes anteriores y no le han funcionado, considere la posibilidad de buscar ayuda de un profesional de la salud mental. Pueden recetar medicamentos para ayudar a aliviar su ansiedad en los viajes y a menudo tienen programas que enseñan técnicas de afrontamiento que puede utilizar cuando tiene miedo a volar. Algunos incluso ofrecen sesiones de realidad virtual que simulan la experiencia de volar en dosis manejables en un entorno de oficina seguro, para que puedas vencer tus miedos incluso antes de poner un pie en el avión.
Cómo superar el miedo
La ansiedad activa la respuesta de estrés del cuerpo (también llamada lucha o huida). Esta oleada instantánea de hormonas del estrés es una respuesta de supervivencia. Te prepara para reaccionar rápidamente y protegerte si lo necesitas. Si tienes miedo o no estás seguro de estar a salvo, la ansiedad te impulsa a ser precavido.
Aprender a afrontar la ansiedad requiere tiempo, paciencia y práctica. Sobre todo, hay que estar dispuesto a enfrentarse a las situaciones que provocan ansiedad. Empieza con un pequeño paso. Cuanto más practiques, mejor será tu capacidad para reducir la ansiedad.
Y si tu ansiedad es extrema o difícil de sobrellevar, o si te sientes ansioso por un problema con el que necesitas ayuda, díselo a uno de tus padres o a otro adulto en el que confíes. Con la atención y el apoyo adecuados, puedes sentirte menos ansioso y más seguro de ti mismo.