Ansiedad constante
Aunque es normal ponerse nervioso ante un acontecimiento importante o un cambio en la vida, unos 40 millones de estadounidenses padecen un trastorno de ansiedad, que es algo más que una preocupación o un miedo ocasional. Los trastornos de ansiedad pueden ir desde el trastorno de ansiedad generalizada (TAG), que consiste en una preocupación intensa que no se puede controlar, hasta el trastorno de pánico, que consiste en episodios repentinos de miedo, junto con palpitaciones del corazón, temblores, sacudidas o sudoración.
Para quienes padecen un trastorno de ansiedad, es importante buscar estrategias que ayuden a controlar o reducir la ansiedad a largo plazo, como la terapia conversacional o la medicación. Pero todo el mundo puede beneficiarse de otras formas de reducir el estrés y la ansiedad con cambios en el estilo de vida, como llevar una dieta equilibrada, limitar el alcohol y la cafeína y dedicar tiempo a uno mismo.
La ansiedad es un estado mental orientado al futuro. Así que, en lugar de preocuparse por lo que va a pasar, “vuelve al presente”, dice la doctora Tamar Chansky, psicóloga y autora de Libérate de la ansiedad. Pregúntate a ti mismo: ¿Qué está ocurriendo ahora mismo? ¿Estoy a salvo? ¿Hay algo que deba hacer ahora mismo? Si no es así, concierta una “cita” para volver a ver tus preocupaciones más tarde en el día, para que esos escenarios lejanos no te desvíen del camino, dice.
Hierbas para la ansiedad
Personas de todos los ámbitos de la vida experimentan a diario depresión, estrés y ansiedad. Factores como el trabajo, los problemas de salud, las preocupaciones por las relaciones y los problemas económicos contribuyen a aumentar los niveles de estrés y, en consecuencia, pueden tener un efecto devastador en la salud mental y física.
Para mantener su bienestar general en óptimas condiciones, es importante reconocer cuándo el estrés es un problema. Si es capaz de localizar la causa, es importante minimizar las influencias negativas lo antes posible: el estrés crónico puede aumentar el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, depresión y asma.
El ejercicio reduce los niveles de las hormonas del estrés en el cuerpo y estimula la producción de endorfinas (las sustancias químicas del cerebro que elevan el estado de ánimo). Mientras que la actividad física alivia activamente el estrés, el comportamiento sedentario puede provocar un mal estado de ánimo e incluso puede hacer que no se duerma bien.
El yoga es también un fantástico ejercicio de bajo impacto que puede hacer que te familiarices poco a poco con el movimiento de tu cuerpo. Lo mejor es que ni siquiera tienes que asistir a clases para convertirte en un yogui profesional. Hay una gran cantidad de clases de yoga virtuales disponibles en línea que puedes hacer desde la comodidad de tu propia sala de estar… ¡¿A qué estás esperando?! Al facilitar tu camino hacia un estilo de vida más activo, es más probable que formes hábitos más saludables y obtengas ese tan deseado alivio instantáneo de la ansiedad y el estrés.
Medicamentos a base de hierbas para la ansiedad
Los suplementos de hierbas no están controlados por la FDA de la misma manera que los medicamentos. A pesar de las normas de control de calidad mejoradas que se aplican desde 2010, la calidad de algunos suplementos puede seguir siendo un problema. Recuerde que lo natural no siempre significa que sea seguro.
Si estás considerando tomar algún suplemento de hierbas como tratamiento para la ansiedad, habla primero con tu médico, especialmente si tomas otros medicamentos. La interacción de algunos suplementos a base de hierbas y ciertos medicamentos puede causar efectos secundarios graves.
Algunos suplementos a base de hierbas que se toman para la ansiedad pueden hacer que te sientas somnoliento, por lo que puede que no sea seguro tomarlos cuando se conduce o se realizan tareas peligrosas. Su médico puede ayudarle a comprender los posibles riesgos y beneficios si decide probar un suplemento de hierbas.
Si la ansiedad interfiere en las actividades diarias, hable con su médico. Las formas más graves de ansiedad suelen necesitar tratamiento médico o asesoramiento psicológico (psicoterapia) para que los síntomas mejoren.
Cómo tratar la ansiedad
Los trastornos de ansiedad afectan a cerca del 20% de los estadounidenses cada año. Y aunque no padezca un trastorno, es posible que experimente síntomas de ansiedad en su vida diaria: es una respuesta normal a las situaciones de estrés.
Si experimenta ansiedad, intente levantarse de su silla unas cuantas veces al día para dar un pequeño paseo, estirarse o hacer unos cuantos saltos. Si puede, vaya al trabajo andando o en bicicleta en lugar de en coche. O añada la tan necesaria conexión social caminando con un amigo o apuntándose a una clase de fitness.
Ten en cuenta que estos suplementos no suelen estar regulados por la FDA, y que los propios suplementos y vitaminas, o los compuestos con los que se envasan, podrían interactuar negativamente con otros medicamentos.
Consulta siempre a un médico para que te aconseje antes de probar un nuevo suplemento, sobre todo si tienes algún problema de salud preexistente o estás tomando algún medicamento con receta, como antidepresivos, antibióticos y anticoagulantes.
Al igual que la cafeína, la nicotina es un estimulante que puede provocar síntomas similares a los de la ansiedad o los ataques de pánico. Al mismo tiempo, dejar de fumar repentinamente puede provocar la abstinencia de la nicotina, que también puede causar ataques de ansiedad.