Baja laboral por salud mental
Todo el mundo sabe que, si tiene gripe, debe quedarse en casa para recuperarse y no contagiar a sus compañeros y amigos. También está claro que dar a luz requiere una baja laboral. ¿Pero qué pasa con el estrés? ¿Se puede realmente tomar una “baja por estrés” en el trabajo?
Sí se puede, y a veces tomar una baja por estrés es lo más adecuado. Puede que no veas tu situación estrictamente como una necesidad de una baja por “estrés”, pero sí como una experiencia de agotamiento, ansiedad o depresión. Debes solicitar una excedencia por cualquiera de estos motivos de forma similar. A continuación te explicamos cómo debes plantear la solicitud de una baja laboral por estrés.
Dirígete a tu departamento de Recursos Humanos y hazles saber que te gustaría tomar una ausencia aprobada por la FMLA para una licencia por estrés. Ellos te proporcionarán la documentación necesaria que debes llevar a tu médico. No basta con decir que está demasiado estresado para trabajar: su médico tendrá que recomendarle que se tome una baja por estrés.
Cuando hables con tu médico, es importante que seas sincero y no minimices tus síntomas. No puede hacer una evaluación justa si usted sigue diciendo: “Está bien. Todo está bien. Sólo estoy un poco estresado”. Recuerda que el estrés puede afectarte tanto física como mentalmente.
Cómo conseguir una baja laboral por estrés y ansiedad
La depresión puede afectar realmente a todos los aspectos de tu vida, y eso incluye tu trabajo. Puede perjudicarle hasta el punto de impedirle realizar las tareas laborales. Ser incapaz de pensar o funcionar como lo haría antes del trastorno del estado de ánimo puede causar una gran cantidad de estrés. Cuando ya no puede realizar las tareas necesarias en el trabajo, tomarse un descanso parece la mejor opción.
Cuando la depresión dificulta el funcionamiento en el trabajo, puedes solicitar una excedencia. El representante de RRHH te ayudará a rellenar los papeles correctos para conseguir una baja válida que te permita recibir tratamiento. Hay beneficios a los que se puede acceder, que se proporcionan a través de leyes federales como la Ley de Permiso Familiar. Puede ser difícil presentar los formularios a través del sistema detallado, así que asegúrate de que alguien de RRHH te ayude.
La depresión es el segundo problema de salud mental más común en los EE.UU. El NIMH informa que más de 17 millones de adultos se enfrentan a esta enfermedad cada año. Los efectos de la depresión son costosos para el país, con un coste de decenas de miles de millones de dólares al año. La mayor parte de este coste se debe a la pérdida de trabajo por absentismo y deterioro del mismo.
Cómo obtener una baja médica
Ahora mismo es un momento difícil para muchos estadounidenses. Casi la mitad de los estadounidenses están estresados por la posibilidad de contraer el coronavirus, y a muchos les preocupa que un ser querido contraiga la enfermedad, según revela una encuesta de la Asociación Americana de Psiquiatría. Los padres están luchando con las tareas de cuidado de los niños. Los empleados trabajan más horas. Además de todo esto, más de dos tercios de los adultos estadounidenses dicen que las elecciones presidenciales de 2020 son una fuente “significativa” de estrés, según una encuesta de la Asociación Americana de Psicología. Y sin embargo, pocos hablan de este estrés con sus jefes.
Sólo 1 de cada 5 empleados habló de su salud mental con un supervisor, y sólo el 5% dijo haber hablado con un representante de RRHH, según una encuesta realizada en julio a 1.000 trabajadores por la empresa de RRHH y nóminas Paychex. Un 30% de los empleados temen que hablar de su salud mental pueda perjudicar su carrera. Esto es un problema no sólo a nivel personal, sino también a nivel empresarial: el agotamiento se asocia a una menor productividad, un mayor absentismo y una mayor rotación de personal. Es importante acabar con el estigma que rodea a la salud mental en el lugar de trabajo. Esto es lo que recomiendan los expertos.
Baja médica por depresión
La salud mental puede tener un enorme impacto en el rendimiento laboral. Siempre hay que hacer todo lo posible para apoyar a los empleados en esta situación. Sin embargo, en un momento dado, puede tener que considerar el despido.
Como empresario, tiene el deber de cuidar a sus empleados. Además, los empleados con discapacidad están protegidos por la legislación laboral británica. Por estas razones, el despido del trabajo debido a la depresión plantea riesgos.
La ley puede considerar la depresión como una discapacidad, lo que le haría responsable de las demandas por discriminación. Éstas conllevan multas ilimitadas y no tienen un periodo de servicio mínimo, por lo que conviene evitarlas a toda costa.
La “actividad cotidiana normal” se define como algo que uno haría regularmente en un día normal. Esto incluye cosas como usar un ordenador, trabajar en horarios fijos o interactuar con la gente. Esto es bastante fácil de clasificar.
Sin embargo, es el segundo calificativo con el que puede tener problemas. La ley la define como algo que dura, o es probable que dure, alrededor de 12 meses. Pero la naturaleza de la depresión significa que puede aparecer, mejorar y volver a aparecer.