Convulsiones inducidas por la ansiedad
Basándose en su experiencia clínica y en sus observaciones, un equipo de médicos y psicólogos del Johns Hopkins afirma que se ha descubierto que más de un tercio de los pacientes ingresados en la unidad de monitorización de epilepsia del Hospital Johns Hopkins para el tratamiento de convulsiones intratables tienen síntomas desencadenados por el estrés en lugar de un verdadero trastorno convulsivo.
Estos pacientes -veteranos de guerra que regresan, madres en batallas por la custodia de sus hijos y profesionales con exceso de trabajo- tienen lo que los médicos llaman crisis psicógenas no epilépticas (PNES). Según los investigadores del Johns Hopkins, sus movimientos incontrolables, sus miradas lejanas o sus convulsiones no son el resultado de las descargas eléctricas anormales en el cerebro que caracterizan a la epilepsia, sino que parecen ser comportamientos relacionados con el estrés que imitan y se diagnostican erróneamente como un trastorno neurológico.
Los investigadores señalan que la medicación anticonvulsiva no detiene los síntomas de estos pacientes, lo que sugiere que no hay ningún problema físico con la actividad eléctrica de sus cerebros. Los investigadores también afirman que los diagnósticos parecen ir en aumento, al menos por lo que han visto en los últimos meses.
Advertencia de incautación
Aunque los episodios similares a las convulsiones por ansiedad pueden parecer convulsiones epilépticas y psicógenas no epilépticas, no lo son. Estos episodios similares a las convulsiones son causados por la forma en que el cuerpo y el sistema nervioso responden a altos grados de estrés agudo y crónico (hiperestimulación), especialmente a grados muy altos.
Al igual que una batidora aumenta su velocidad cuando se sube el voltaje, el estrés puede aumentar tanto la actividad eléctrica del sistema nervioso (que incluye el cerebro) que desencadena episodios de tipo convulsivo en algunas personas.
La combinación de una buena información de autoayuda y el trabajo con un terapeuta, entrenador o consejero experimentado en trastornos de ansiedad es la forma más eficaz de abordar la ansiedad y sus numerosos síntomas. Hasta que no se aborden las causas fundamentales de la ansiedad -que llamamos factores subyacentes de la ansiedad-, la lucha contra el malestar por la ansiedad puede volver una y otra vez. Tratar los factores subyacentes de la ansiedad es la mejor manera de abordar la ansiedad problemática.Terapeutas disponiblesPedir citaRecursos adicionales
Ataque de pánico
Las personas con epilepsia tienden a experimentar problemas de salud mental con más frecuencia que la población general, por diversas razones. Por ejemplo, los investigadores creen que es posible que los mismos cambios en el desarrollo del cerebro que causan la epilepsia puedan provocar también síntomas de salud mental.
Los medicamentos anticonvulsivos también pueden afectar a la salud mental con sus efectos secundarios. Algunos pueden mejorar el estado de ánimo. Pero otros medicamentos pueden causar fatiga. También pueden aumentar la ansiedad, la depresión y la irritabilidad. En ocasiones, algunos medicamentos provocan comportamientos psicóticos, es decir, cambios intensos en los pensamientos y la percepción.
Además de estos factores, vivir con epilepsia es estresante, especialmente cuando los medicamentos no controlan las crisis. En resumen, la epilepsia y la salud mental son una mezcla complicada, pero que se puede abordar con un tratamiento eficaz de las crisis y el apoyo adecuado.
Además de los posibles efectos secundarios del tratamiento y las secuelas físicas de las crisis, la vida puede cambiar de muchas maneras con la epilepsia. Entre el 25% y el 50% de las personas con epilepsia sufren depresión, es decir, una sensación persistente de tristeza y pérdida de interés en la vida cotidiana.
Pnes
Cuando hay convulsiones, el médico suele hacer una prueba de epilepsia al paciente. La prueba más útil para confirmar la epilepsia es el electroencefalograma (EEG). En él se registra la actividad eléctrica del cerebro, incluidos los picos anormales en los patrones de actividad eléctrica. Con estos patrones se pueden identificar diferentes tipos de epilepsia.
La psicoterapia es el tratamiento más común para las ENS. Puede incluir la terapia cognitivo-conductual (TCC). La TCC examina la conexión entre los pensamientos de una persona y sus sentimientos y comportamientos. La TCC y otras psicoterapias tardan varios meses en funcionar. Es importante que el paciente continúe su plan de tratamiento durante este tiempo.