Tratamiento de la ansiedad en casa
Existen distintos niveles de ansiedad, tanto subjetivos como biológicos. Algunas personas padecen una ansiedad grave y debilitante que requiere una intervención médica inmediata. Algunas personas padecen una ansiedad moderada que afecta drásticamente a su vida, pero siguen siendo capaces de vivir cada día. Otras experimentan una ansiedad leve, que es algo que pueden manejar con bastante facilidad, pero que sigue haciendo que su vida sea más estresante.
Casi nadie que sufra de ansiedad constante describiría su ansiedad como “leve”. Es poco probable que la mayoría de las personas que padecen una ansiedad subjetivamente leve piensen que tienen ansiedad. Pero, ¿qué es la ansiedad leve y hay formas más fáciles de superarla?
Es importante recordar que si la ansiedad está perjudicando su calidad de vida, merece ser tratada. No preste atención a etiquetas como “leve” o “grave”. Si sufres ansiedad y te molesta, busca ayuda.
La ansiedad leve es aquella que se puede controlar sin necesidad de técnicas adicionales. Al decir “manejable”, no estamos diciendo que desaparezca fácilmente. Lo que decimos es que todavía puedes pasar el día sin entrar en pánico, puedes disfrutar de una vida social e incluso puedes encontrar aficiones y actividades divertidas. Incluso puede pensar positivamente en el futuro.
Medicación para el tratamiento de la ansiedad leve
La ansiedad es la respuesta física del cuerpo a una amenaza o a la percepción de una amenaza. Provoca palpitaciones, respiración acelerada, mariposas en el estómago y una explosión de energía, así como respuestas mentales como temores excesivos, preocupaciones o pensamientos obsesivos.
Todo el mundo experimenta ansiedad de vez en cuando. Nos ayuda a evitar el peligro dándonos energía y alerta para escapar. Pero para algunas personas, los sentimientos de ansiedad no desaparecen. Pueden ver las situaciones como algo mucho peor de lo que realmente son, y su ansiedad afecta a su capacidad de concentración, de dormir y de realizar las tareas habituales. Estos sentimientos pueden estar causados por trastornos de ansiedad.
En cualquier momento, si sientes que puedes hacerte daño o tienes pensamientos suicidas, llama a una ambulancia al triple cero (000). También puedes hablar con tu familia o amigos, con tu médico o llamar a un servicio telefónico como Lifeline en el 13 11 14, disponible las 24 horas del día.
Si algunos de estos síntomas afectan a tu vida, es conveniente que hables de ellos con un médico, un consejero o un profesional de la salud mental. Puede llevar tiempo sentirse mejor, pero recibir ayuda profesional puede ayudarle a controlar la ansiedad y reducir sus efectos en su vida y bienestar.
Síntomas de ansiedad severos
Todo el mundo tiene sentimientos de ansiedad en algún momento de su vida. Por ejemplo, es posible que te sientas preocupado y ansioso por presentarte a un examen, a una prueba médica o a una entrevista de trabajo. En momentos así, sentirse ansioso puede ser perfectamente normal.
Las personas con TAG se sienten ansiosas casi todos los días y a menudo les cuesta recordar la última vez que se sintieron relajadas. El TAG puede provocar síntomas psicológicos (mentales) y físicos. Éstos varían de una persona a otra, pero pueden incluir una sensación de inquietud o preocupación y problemas de concentración o sueño.
También hay muchas cosas que puede hacer usted mismo para ayudar a reducir su ansiedad, como seguir un curso de autoayuda, hacer ejercicio regularmente, dejar de fumar y reducir la cantidad de alcohol y cafeína que toma.
Si la ansiedad se debe a una fobia específica o a un trastorno de pánico, normalmente sabrá cuál es la causa. Por ejemplo, si tienes claustrofobia (miedo a los espacios cerrados), sabrás que estar encerrado en un espacio pequeño te provocará ansiedad.
Cómo se diagnostica la ansiedad
La ansiedad ocasional es una parte normal de la vida. Muchas personas se preocupan por cosas como la salud, el dinero o los problemas familiares. Pero los trastornos de ansiedad implican algo más que una preocupación o un miedo temporales. En el caso de las personas con un trastorno de ansiedad, la ansiedad no desaparece y puede empeorar con el tiempo. Los síntomas pueden interferir en las actividades diarias, como el rendimiento laboral, las tareas escolares y las relaciones.
El trastorno de ansiedad generalizada (TAG) suele implicar una sensación persistente de ansiedad o temor, que puede interferir en la vida diaria. No es lo mismo que preocuparse ocasionalmente por cosas o experimentar ansiedad debido a acontecimientos vitales estresantes. Las personas que padecen un trastorno de ansiedad generalizada experimentan una ansiedad frecuente durante meses, si no años.
Las personas con trastorno de pánico tienen ataques de pánico frecuentes e inesperados. Los ataques de pánico son periodos repentinos de miedo intenso, malestar o sensación de pérdida de control, incluso cuando no hay un peligro o desencadenante claro. No todas las personas que experimentan un ataque de pánico desarrollan un trastorno de pánico.
Las personas con trastorno de pánico a menudo se preocupan por el momento en que se producirá el próximo ataque e intentan activamente prevenir futuros ataques evitando lugares, situaciones o comportamientos que asocian con los ataques de pánico. Los ataques de pánico pueden ocurrir tan frecuentemente como varias veces al día o tan raramente como unas pocas veces al año.