Diferentes medicamentos
Los jóvenes pueden consumir anfetaminas en discotecas y fiestas o en épocas de exámenes y situaciones en las que quieren más energía. Lee nuestros consejos sobre lo que los padres deben saber sobre las drogas o visita Habla con Frank para obtener más información sobre las drogas y el alcohol.
Se vende como resina dura o desmenuzable o como hierba seca. Los cogollos de la planta de cannabis contienen más droga que los tallos y las hojas. Se suele fumar con tabaco en un roll up. Hay muchos tipos diferentes de cannabis, como Skunk, Sensimilia, Purple Haze, etc.
La cocaína se compra en forma de polvo blanco. Normalmente se esnifa, pero puede prepararse para ser inyectada. El crack se presenta en forma de “pequeñas piedras” y puede fumarse e inyectarse. Lee nuestro artículo sobre cómo hablar con los adolescentes sobre las drogas.
La GBL es una droga para fiestas especialmente popular entre los estudiantes universitarios, y puede ser mortal si se toma con alcohol. Causó la muerte de la estudiante de 21 años Hester Stewart en Brighton en 2009. Sus peligros se pusieron de manifiesto cuando Mikaela Tyhurst, de 22 años, reveló cómo su aspecto y su salud habían quedado destrozados tras consumir GBL durante los cuatro años anteriores. Más información sobre las fiestas de adolescentes.
Las peores drogas para el cerebro
Fármacos y su clasificaciónLos depresores son fármacos que ralentizan el sistema nervioso central y los mensajes que van entre el cerebro y el cuerpo. Estos fármacos disminuyen la concentración de las personas y ralentizan su capacidad de respuesta. El nombre “depresor” sugiere que estos fármacos pueden hacer que una persona se sienta deprimida, pero no siempre es así. El término depresor se refiere únicamente al efecto de ralentizar el sistema nervioso central. Algunos ejemplos de depresores son: el alcohol, los opioides (por ejemplo, la heroína), los barbitúricos y el GHB.
Los estimulantes (también denominados psicoestimulantes) son fármacos que estimulan el sistema nervioso central y aceleran los mensajes entre el cerebro y el cuerpo. Estas drogas suelen aumentar la energía, el ritmo cardíaco y el apetito. Algunos ejemplos de psicoestimulantes son: la metanfetamina (speed, ice, base), la cocaína, la dexanfetamina, la cafeína, la nicotina y el MDMA/éxtasis.
Los alucinógenos son drogas que suelen alterar la forma en que una persona percibe el mundo. Estas drogas pueden cambiar la forma en que una persona ve, oye, sabe, huele o siente cosas diferentes, incluso experimentando cosas que no existen en absoluto. Algunos ejemplos de alucinógenos son: la ketamina, las setas mágicas y el LSD.
Droga G
Gran parte de la distinción una noción subjetiva, concebida socialmente, de las consecuencias del uso de cada una. Dependiendo del contexto, una droga concreta puede clasificarse de muchas maneras diferentes por diversos motivos.
No todas las drogas encajan en la etiqueta de “droga dura” o “droga blanda”. Algunos ejemplos son la MDMA, la ketamina y la cafeína [cita requerida] La MDMA comparte algunas características con las drogas blandas en el sentido de que no produce adicción física. Sin embargo, algunos estudios afirman que podría ser psicológicamente adictiva, aunque tal afirmación es muy controvertida en la comunidad médica. También es más fácil sufrir una sobredosis que con muchas drogas blandas, aunque no tanto como con muchas drogas duras.
Algunos ejemplos de drogas blandas son el cannabis, la mescalina, la psilocibina y el LSD. El MDMA y la cafeína se incluyen a veces como drogas blandas, véase más arriba. El término droga blanda se aplica generalmente al cannabis (marihuana o hachís).
La distinción entre drogas blandas y drogas duras es importante en la política de drogas de los Países Bajos, donde la producción, la venta al por menor y el consumo de cannabis están sometidos a la tolerancia oficial, bajo ciertas condiciones. Otras drogas, como las setas de psilocibina y el LSD, también son consideradas drogas blandas por muchos porque no hay pruebas de adicción física, y una sobredosis tóxica de estas sustancias requiere, en algunos casos, cientos de veces la dosis normal. Sin embargo, es posible que uno tome más de lo que es psicológicamente capaz de manejar, lo que lleva a situaciones peligrosas y experiencias negativas.
Lista de medicamentos a-z
Las drogas que actúan sobre el sistema nervioso, como el cerebro, y que repercuten en el estado mental de una persona, pueden clasificarse de manera vaga e informal en categorías. Las siguientes categorías no están totalmente consensuadas a nivel mundial:
Todas las drogas -nicotina, cocaína, marihuana y otras- afectan al circuito de “recompensa” del cerebro, que forma parte del sistema límbico. Esta zona del cerebro afecta al instinto y al estado de ánimo. Las drogas se dirigen a este sistema, lo que hace que grandes cantidades de dopamina -una sustancia química del cerebro que ayuda a regular las emociones y la sensación de placer- inunden el cerebro[3] Esta inundación de dopamina es lo que provoca un “subidón”. Es una de las principales causas de la adicción a las drogas.
Aunque el consumo inicial de drogas puede ser voluntario, éstas pueden alterar la química del cerebro. Esto puede cambiar el funcionamiento del cerebro e interferir en la capacidad de elección de la persona. Puede conducir a intensos antojos y al consumo compulsivo de drogas. Con el tiempo, este comportamiento puede convertirse en una dependencia de sustancias o en una adicción a las drogas y al alcohol[4].
Los cargos relacionados con las drogas duras suelen ser, aunque no siempre, más duros que los de las drogas blandas. El comercio y el tráfico de opiáceos son tratados con seriedad por la ley en muchos países debido al daño potencial[5] En Estados Unidos, la marihuana, o el cannabis, se clasifica como una sustancia química de la que se puede abusar y que es altamente adictiva, y se acusa fuertemente a nivel federal, incluso si va en contra de la evidencia científica o de las leyes que varían según el estado. Esto se invierte en el caso del alcohol, que puede causar una gran dependencia y adicción, pero normalmente se cobra con una pena mínima o nula y se vende ampliamente en el mundo occidental.