Saltar al contenido

Fobia a lugares cerrados con mucha gente

junio 18, 2022
Fobia a lugares cerrados con mucha gente

Nyctophobia

Una fobia es un tipo de trastorno de ansiedad. Si tiene una fobia, tendrá una necesidad abrumadora de evitar todo contacto con la fuente de su ansiedad. Entrar en contacto con la causa de su fobia, o incluso pensar en ello, puede provocarle ansiedad y causarle pánico.

Si la causa de su fobia es un objeto o animal con el que no entra en contacto habitualmente, como una serpiente, es poco probable que afecte a su vida cotidiana. Sin embargo, si tiene una fobia más compleja, como la agorafobia (véase más adelante), puede resultarle muy difícil llevar una vida normal.

Las fobias afectan a distintas personas de manera diferente. Algunas personas sólo reaccionan con una ansiedad leve cuando se enfrentan al objeto de su miedo, mientras que otras experimentan una ansiedad grave o sufren un ataque de pánico severo.

Las fobias complejas tienden a ser más incapacitantes que las fobias simples porque suelen estar asociadas a un miedo o ansiedad muy arraigados a una circunstancia o situación concreta. Dos ejemplos comunes de fobias complejas son la agorafobia y la fobia social.

Miedo a las alturas

La claustrofobia es el miedo a los espacios cerrados. Puede desencadenarse por muchas situaciones o estímulos, como los ascensores, especialmente cuando están llenos, las habitaciones sin ventanas y las habitaciones de hotel con puertas cerradas y ventanas selladas. Incluso las habitaciones con cerradura en el exterior, los coches pequeños y la ropa ajustada al cuello pueden inducir una respuesta en las personas con claustrofobia. Se suele clasificar como un trastorno de ansiedad, que a menudo da lugar a ataques de pánico. La aparición de la claustrofobia se ha atribuido a muchos factores, como la reducción del tamaño de la amígdala y el condicionamiento clásico.

  Tipos de fobias en ingles

Un estudio indica que entre el 5 y el 10% de la población mundial padece claustrofobia grave, pero sólo un pequeño porcentaje de estas personas recibe algún tipo de tratamiento para el trastorno.

La claustrofobia está clasificada como un trastorno mental y conductual, [1] específicamente un trastorno de ansiedad. Los síntomas suelen desarrollarse durante la infancia o la adolescencia[2]. Se cree que la claustrofobia suele tener un síntoma clave: el miedo a la asfixia. En al menos uno, si no varios, de los siguientes ámbitos: habitaciones pequeñas, aparatos de resonancia magnética o de TAC, coches, autobuses, aviones, trenes, túneles, cuevas submarinas, sótanos, ascensores y cuevas.

Miedo a la restricción

Es natural sentirse a veces cohibido, nervioso o tímido delante de los demás. La mayoría de las personas superan estos momentos cuando lo necesitan. Pero para algunos, la ansiedad que acompaña al sentimiento de timidez o cohibición puede ser extrema.

Cuando las personas se sienten tan cohibidas y ansiosas que les impide hablar o socializar la mayor parte del tiempo, probablemente se trate de algo más que timidez. Puede tratarse de una condición de ansiedad llamada fobia social (también llamada ansiedad social).

Las personas con fobia social suelen relacionarse fácilmente con su familia y con algunos amigos íntimos. Pero conocer a gente nueva, hablar en grupo o hacerlo en público puede provocar una timidez extrema.

En el caso de la fobia social, la timidez extrema, la timidez y el miedo a la vergüenza se interponen en la vida. En lugar de disfrutar de las actividades sociales, las personas con fobia social pueden temerlas y evitarlas por completo.

Al igual que otras fobias, la fobia social es una reacción de miedo a algo que no es realmente peligroso, aunque el cuerpo y la mente reaccionan como si el peligro fuera real. Esto significa que alguien siente sensaciones físicas de miedo, como la aceleración de los latidos del corazón y la respiración. Esto forma parte de la respuesta de lucha y huida del cuerpo. Están causadas por una descarga de adrenalina y otras sustancias químicas que preparan al cuerpo para luchar o huir rápidamente.

  Flores de bach para fobia social

Fobia a la pérdida

La claustrofobia es un tipo de agorafobia. A las personas con agorafobia les preocupan las situaciones en las que no hay una forma fácil de escapar o de conseguir ayuda si se ponen muy ansiosos. Otros tipos de agorafobia son el miedo al transporte público, a los espacios abiertos, a las multitudes y a estar solo en el exterior.

La claustrofobia puede hacer que las personas se sientan muy incómodas y ansiosas en espacios cerrados. Los ataques de pánico pueden ser muy aterradores y pueden ser tan intensos que una persona puede intentar evitar las situaciones en las que se ha producido un ataque.

Las personas con claustrofobia pueden cambiar su comportamiento y sus rutinas por el miedo a sufrir un ataque de pánico. En casos graves, algunas personas pueden sentirse incapaces de salir de casa. Si esto ocurre, busque ayuda.

Si le han diagnosticado una forma de ansiedad, como la claustrofobia, su médico puede aconsejarle que pruebe primero un tratamiento psicológico (terapias de conversación), como la terapia cognitivo-conductual (TCC).

El Trastorno de Ansiedad Social (TAS) es una forma de ansiedad que se produce en determinadas situaciones sociales (por ejemplo, hablar en público o conocer a gente nueva) y que puede llevar a las personas a evitar esas situaciones sociales. Más información sobre el TAS y las opciones de tratamiento

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad