Salud mental Depresión adolescente
La adolescencia es la edad de inicio de muchos trastornos mentales, como la ansiedad, la depresión y el abuso de sustancias. La mitad de los trastornos mentales suelen empezar a mediados de la adolescencia y tres cuartas partes a principios y mediados de la veintena.
Casi una cuarta parte de los adolescentes australianos de entre 15 y 19 años tienen ahora síntomas de enfermedad mental, lo que supone un aumento significativo en los últimos cinco años, a pesar de la creciente concienciación sobre los problemas de salud mental y de una serie de iniciativas nacionales para abordar el problema.
Los tres principales problemas identificados en la encuesta más reciente fueron la salud mental (33,7%), el alcohol y las drogas (32,0%) y la equidad y la discriminación (27,3%). En 2015, solo el 14,9% de los participantes identificó la salud mental como un problema preocupante.
El afrontamiento del estrés, los problemas en la escuela y la imagen corporal se situaron como los principales problemas personales que preocupan, con un 40% de los encuestados que admitieron estar muy o muy preocupados por el afrontamiento del estrés.
Si eres un joven, o el padre de un adolescente que puede estar luchando con problemas de salud mental, aquí tienes algunos consejos para trabajar para mejorar el bienestar mental y una transición segura a la edad adulta.
La depresión y los adultos jóvenes – Qué es la depresión
Si tu hijo te dice que tiene pensamientos persistentes sobre hacerse daño o que quiere morir, busca ayuda profesional urgente. Llama a Lifeline en el 131 114, o acude a tu médico de cabecera, a un servicio de salud mental o al servicio de urgencias de un hospital. Las personas deprimidas corren un mayor riesgo de suicidio.Obtener ayuda para los adolescentes con depresiónEs poco probable que la depresión desaparezca por sí sola, pero los adolescentes con depresión suelen mejorar con tratamiento. Esto significa que lo mejor que puede hacer es buscar ayuda temprana para su hijo.Buscar ayuda también demuestra a su hijo que le importa. Hablar con su hijo y acudir juntos a un profesional de la salud le transmite el mensaje de que no está solo. Y la mayoría de los jóvenes no buscan ayuda por sí mismos, así que es probable que su hijo necesite su ayuda para obtener apoyo profesional.Si ha intentado hablar con su hijo, pero éste ha rechazado la ayuda o ha dicho que no le pasa nada, es posible que tenga que buscar ayuda por sí mismo para empezar.Hay muchos profesionales y servicios a los que puede acudir para obtener ayuda con la depresión adolescente:Estos recursos también tienen información útil sobre el apoyo a la salud mental de los adolescentes:Si no está seguro, su médico de cabecera podrá orientarle sobre los servicios más adecuados para su familia.
El estado de ánimo y el bienestar de los jóvenes
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Herramienta en línea del Centro Cundill para el tratamiento de los jóvenes
No es inusual que los jóvenes experimenten “la depresión” o se sientan “deprimidos” de vez en cuando. La adolescencia es siempre una época inquietante, con los numerosos cambios físicos, emocionales, psicológicos y sociales que acompañan a esta etapa de la vida.
Las expectativas académicas, sociales o familiares poco realistas pueden crear un fuerte sentimiento de rechazo y llevar a una profunda decepción. Cuando las cosas van mal en la escuela o en casa, los adolescentes suelen reaccionar de forma exagerada. Muchos jóvenes sienten que la vida no es justa o que las cosas “nunca salen como ellos quieren”. Se sienten “estresados” y confundidos. Para empeorar las cosas, los adolescentes son bombardeados por mensajes contradictorios de los padres, los amigos y la sociedad. Los adolescentes de hoy ven más de lo que la vida les ofrece -tanto lo bueno como lo malo- en la televisión, en la escuela, en las revistas y en Internet. También se ven obligados a conocer la amenaza del sida, aunque no sean sexualmente activos ni consuman drogas.
Los adolescentes necesitan más que nunca la orientación de los adultos para entender todos los cambios emocionales y físicos que están experimentando. Cuando el estado de ánimo de los adolescentes perturba su capacidad para funcionar en el día a día, puede indicar un trastorno emocional o mental grave que requiere atención: la depresión adolescente. Los padres o cuidadores deben tomar medidas.