Bostezo excesivo nhs
No es raro que su ansiedad le haga bostezar más. En realidad, el bostezo es un síntoma muy común de la ansiedad, especialmente si tiene ataques de ansiedad, y no es sólo porque la ansiedad pueda dejarle fatigado.
El bostezo es un misterio de la ciencia, que por otra parte es completamente normal. La mayoría de las veces, el bostezo se debe a la falta de sueño, pero en muchos casos el bostezo puede ser el resultado de la forma en que su cuerpo responde a la ansiedad, particularmente durante un ataque de ansiedad.
La ansiedad provoca algunas respuestas físicas inusuales, pero el bostezo es fácilmente una de las más extrañas. Sin embargo, la razón de los bostezos es bastante simple. Cuando se tiene ansiedad, especialmente en los ataques de ansiedad, el cuerpo tiende a hiperventilar.
Cuando se hiperventila, el cuerpo empieza a sentir que no está respirando completamente. Como respuesta, intenta bostezar, ya que el bostezo expande la caja torácica y envía una señal al cerebro de que, efectivamente, ha respirado completamente. En este sentido, el bostezo trata de decirle a tu cuerpo que se relaje.
No puedo bostezar
Los síntomas de ansiedad por bostezo excesivo pueden aparecer y desaparecer raramente, ocurrir con frecuencia o persistir indefinidamente. Por ejemplo, usted experimenta un bostezo excesivo de vez en cuando y no tan a menudo, bosteza de vez en cuando o tiene ganas de bostezar todo el tiempo.
La ansiedad estresa el cuerpo. El estrés provoca cambios fisiológicos, psicológicos y emocionales específicos que aumentan la capacidad del cuerpo para enfrentarse a una amenaza -para luchar o huir de ella-, razón por la que la respuesta al estrés suele denominarse respuesta de lucha o huida[1][2].
Parte de estos cambios del estrés incluyen el aumento de la frecuencia cardíaca, la respiración y la tensión de los músculos del cuerpo para poder hacer frente a la amenaza. El cambio en el ritmo cardíaco, la respiración y la tensión de los músculos del pecho pueden hacer que parezca que te falta el aire, lo que puede provocar un bostezo excesivo. Muchas personas notan que bostezan cuando están nerviosas o ansiosas.
Cuando el estrés es poco frecuente, el cuerpo puede recuperarse con relativa rapidez. Sin embargo, cuando el estrés se produce con demasiada frecuencia, el cuerpo tiene dificultades para recuperarse. La recuperación incompleta puede hacer que el cuerpo permanezca en un estado de semipreparación de la respuesta al estrés, lo que llamamos hiperestimulación de la respuesta al estrés[3][4] Un cuerpo que se estresa crónicamente puede mostrar síntomas de estrés, como el bostezo excesivo.
¿Por qué tengo que bostezar para recuperar el aliento?
[Total: 1 Media: 5]¿Quién no bosteza? Puede que te encuentres bostezando al despertarte, en el trabajo o antes de acostarte. Con mucha razón, la gente asocia el bostezo con el agotamiento y el aburrimiento. Bostezar es muy beneficioso para la salud: enfría el cerebro, mejora la circulación sanguínea y alivia el estrés. Pero si bosteza a menudo, puede que no sea tan inocuo. Podría significar alguna complicación de salud subyacente.
Antes de aprender sobre el bostezo excesivo, primero tenemos que entender qué es el bostezo. El propósito del bostezo aún no se entiende del todo, pero sí conocemos varios factores desencadenantes que pueden hacernos bostezar en condiciones normales. He aquí algunos de ellos:
Cambio de altitud – Un cambio de altitud (como volar en un avión, subir a una montaña) puede hacernos bostezar automáticamente. Algunas personas también bostezan intencionadamente en estas condiciones como medio para igualar la presión del oído.
Bostezo empático – También tendemos a bostezar cuando vemos bostezar a otras personas. Esto es especialmente cierto si estamos cerca y sentimos empatía por la persona que bosteza. Curiosamente, incluso leer sobre bostezos puede hacer que la gente bostece (¿acabas de bostezar mientras leías esto?).
Por qué no puedo bostezar del todo
El bostezo, frecuente en la vida cotidiana, se acepta como un complejo reflejo de excitación. El bostezo excesivo puede deberse a enfermedades neurológicas, psiquiátricas, infecciosas, gastrointestinales o metabólicas. Este reflejo también se ha asociado a diferentes inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina. Presentamos el caso de una paciente con bostezos excesivos que estaba en tratamiento con inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina con el diagnóstico de trastorno de ansiedad generalizada. Posteriormente se descubrió que tenía un carcinoma de endometrio. Sus quejas de palpitaciones, falta de aire y pérdida de energía podrían explicarse por una enfermedad psiquiátrica y/o una anemia. Los periodos anémicos anteriores y la respuesta parcial de sus síntomas psiquiátricos durante los últimos 3 años nos alertaron para pensar en una causa orgánica. Las investigaciones sobre la anemia de la enfermedad crónica dieron como resultado el diagnóstico de carcinoma de endometrio. Este caso es un buen ejemplo que muestra un diagnóstico erróneo causado por la estigmatización médica.