Qué hacer si se pierde el empleo
El miedo a perder el empleo se refiere a la amenaza sentida, el estrés y la percepción de impotencia por la posibilidad de dejar el trabajo actual y no ser contratado en el mercado laboral. El miedo como tal genera ansiedad y disminuye el bienestar de los trabajadores e incluso de las personas a su cargo.
La forma en que los individuos reaccionan a las características rápidamente cambiantes de las condiciones de trabajo depende de una serie de factores, como las perspectivas del mercado laboral, la empleabilidad, el carácter individual y la responsabilidad familiar. El miedo a la pérdida de empleo se origina principalmente en la previsión de un traslado o cambio de trabajo involuntario en relación con la continuidad o la seguridad. Las personas que se preocupan constantemente por la pérdida de su puesto de trabajo presentan un peor estado de salud física y más síntomas de depresión que los que realmente fueron despedidos. Esto sugiere que el miedo a la pérdida del empleo puede ser peor que la propia pérdida (Burgard, Brand y House, 2009). Los individuos pueden diferir en su respuesta cuando perciben que su empleo está en peligro.
Ansiedad por la búsqueda de empleo
Alison Doyle es una de las principales expertas en carreras profesionales del país y ha asesorado tanto a estudiantes como a empresas sobre prácticas de contratación. Ha concedido cientos de entrevistas sobre el tema para medios como The New York Times, BBC News y LinkedIn. Alison fundó CareerToolBelt.com y ha sido una experta en este campo durante más de 20 años.
La búsqueda de empleo puede ser estresante, incluso para la persona más segura de sí misma. Puede ser más difícil si estás ansioso y preocupado por el proceso de contratación, así como por el momento en que serás contratado para un nuevo puesto.
Si está desempleado, el estrés puede verse agravado por la preocupación de cuánto tiempo va a tardar en encontrar un nuevo trabajo y cómo va a pagar las facturas hasta que consiga un nuevo puesto. Si no has tenido que buscar trabajo o hacer una entrevista en un tiempo, eso también puede aumentar tu nivel de estrés.
“La gente está ansiosa por diferentes razones”, dice la Dra. Janet Scarborough Civitelli, psicóloga, consejera profesional y fundadora de VocationVillage.com. “Ayuda a identificar los pensamientos y las situaciones que causan más angustia, y abordarlos uno por uno”.
Depresión y desempleo
El impacto de la pandemia en el empleo ha sido difícil de evaluar, porque las medidas tradicionales de empleo no captan adecuadamente la actividad de la pandemia, como el cierre temporal de algunos sectores y el paso a horas reducidas (o ninguna) debido al plan de permisos. A pesar de estas iniciativas, la tasa de desempleo aumentó del 3,8% en los 3 meses hasta noviembre de 2019 al 5,0% un año después. Con los planes de apoyo a la pandemia que terminarán este otoño, se espera un nuevo aumento del desempleo.
Antes de la pandemia, algunos grupos -como los más jóvenes y los pertenecientes a grupos étnicos minoritarios- tenían más probabilidades de estar desempleados. Estos grupos también han sido los más afectados por el efecto de las restricciones de la pandemia, ya sea por el desempleo, la pérdida de trabajo o la reducción de los salarios.
El gráfico 1 pone de manifiesto este patrón, mostrando la tasa de desempleo declarada para la población en edad de trabajar (entre 18 y 64 años) en enero de 2021 por diferentes características. Los jóvenes, los hombres, las personas pertenecientes a grupos étnicos minoritarios y los trabajadores menos cualificados tenían más probabilidades de estar desempleados que otros sectores de la población. Antes de la pandemia, aunque la tasa de desempleo era menor, la probabilidad relativa de desempleo para los diferentes grupos era similar.
Qué hacer cuando no se tiene trabajo
La búsqueda de empleo puede tardar un poco más en tiempos de incertidumbre económica, pero no durará para siempre. Si te mantienes firme, al final encontrarás un trabajo que te anime y te haga feliz.
Mantener una actitud positiva es importante cuando se busca un trabajo, aunque a veces resulte difícil. Intenta aguantar y aprovechar al máximo el tiempo de búsqueda de empleo encontrando formas de hacerlo interesante o divertido.
Establezca una rutina de búsqueda de empleo con un horario en el que busque trabajo a una hora determinada cada día. Disfruta del reto de descubrir nuevos puestos a los que optar, y recompénsate cuando termines realizando las actividades que te hacen feliz.
Por ejemplo, empieza anotando tus puntos más destacados y tus “victorias” en cada uno de tus puestos, y luego planifica la actualización de tu currículum y tu carta de presentación en consecuencia. A partir de ahí, puedes actualizar también tu perfil de LinkedIn o encontrar una forma de reflexionar sobre lo que te haría feliz en un trabajo.
Busca empresas que ofrezcan el tipo de trabajos y culturas que encajen bien contigo (por ejemplo, trabajos a distancia en atención al cliente), y luego aprende todo lo que puedas sobre esas empresas y las personas con las que potencialmente trabajarías y para las que trabajarías. Cuanto más informado y preparado se sienta en su búsqueda de empleo, más confianza sustituirá a las dudas en su mente. También ahorrarás tiempo porque sabrás exactamente lo que quieres y sólo solicitarás los trabajos que se ajusten a ti y a tus habilidades.