Signos de perimenopausia
Aunque, como dice el refrán, el cerebro es el órgano sexual más importante de la mujer, no podemos negar el papel que desempeña nuestro cuerpo, especialmente a medida que envejecemos. Un sexo satisfactorio depende de varias cosas: la presencia de deseo, la excitación, la ausencia de dolor y la capacidad de llegar al orgasmo. Después de la menopausia, la libido disminuye y los cambios en nuestro cuerpo pueden dificultar la excitación, hacer que el coito sea doloroso y que sea imposible alcanzar el clímax. No es de extrañar que muchas mujeres se sientan insatisfechas con el sexo y que algunas eviten por completo la intimidad.
Hace varios años, una gran encuesta nacional descubrió que la actividad sexual disminuía precipitadamente con la edad. Menos de la mitad de las mujeres de entre 57 y 73 años dijeron ser sexualmente activas, y las que lo eran tenían relaciones sexuales menos de dos veces al mes, por término medio.
La naturaleza no ha previsto que las mujeres sean sexualmente activas después de la menopausia, así que tienen que esforzarse y ser creativas. Para ello, las mujeres deben explorar los factores emocionales, físicos y médicos que pueden sabotear la respuesta sexual y aprovechar una amplia variedad de terapias para abordarlos.
Perimenopausia español
La salud y el bienestar general de una mujer están estrechamente ligados a sus funciones reproductivas y a las hormonas que las controlan. Este hecho se pone de manifiesto a medida que las mujeres atraviesan las distintas etapas de su vida, desde la pubertad hasta la edad reproductiva y la menopausia.
Cada una de estas etapas se rige por los niveles de hormonas reproductivas que aumentan y disminuyen, llevándolas a una verdadera montaña rusa por la vida. Y ninguna etapa puede ser más pronunciada que su paso por la menopausia, que pone fin a su fase reproductiva, y también puede traer efectos secundarios desafortunados que causan estragos en su vida sexual.
En Women’s Healthcare de Princeton, nuestro equipo de mujeres especialistas en salud de la mujer ayuda a nuestros pacientes a navegar por estas diferentes etapas, dándoles las herramientas que necesitan para garantizar la mejor calidad de vida posible. Y cuando se trata de la menopausia, el equipo entiende mejor que la mayoría de los efectos secundarios mentales y físicos de esta transición, ya que nuestros médicos han completado la formación adicional y la certificación de la Sociedad Norteamericana de Menopausia.
La menopausia masculina
Al no tener que preocuparse por la menstruación, el embarazo o la entrada de los hijos, su vida sexual posmenopáusica debería ser estelar, ¿verdad? Puede ser buena, pero no esperes que sea el mismo tipo de sexo que tenías a los 20 años, dice el doctor Chris Kraft, director de servicios clínicos de la Clínica de Sexo y Género del departamento de psiquiatría de Johns Hopkins Medicine.
“Aunque tengas más libertad en casa, también es una etapa de la vida con muchos cambios que pueden afectar a tu intimidad”, dice. “Estáis redefiniendo vuestros roles y vuestra relación a medida que los niños se van a la universidad y vuestras carreras se reducen. Y también estás cambiando físicamente”.
El estrógeno cae en picado durante la menopausia (definida como la ausencia de ciclo menstrual en 12 meses) y los años previos, llamados perimenopausia. Este cambio tiene un gran impacto en la función sexual. Puede disminuir el deseo y dificultar la excitación. También puede hacer que el canal vaginal sea menos elástico y que experimentes sequedad, lo que puede hacer que las relaciones sexuales sean dolorosas. Más de un tercio de las mujeres en la perimenopausia, o en la posmenopausia, afirman tener dificultades sexuales, desde la falta de interés en el sexo hasta problemas para tener un orgasmo.
Sofocos en la menopausia
La salud y el bienestar general de una mujer están estrechamente ligados a sus funciones reproductivas y a las hormonas que las controlan. Este hecho queda perfectamente claro a medida que las mujeres atraviesan las distintas etapas de su vida, desde la pubertad hasta la edad reproductiva y luego la menopausia.
Cada una de estas etapas se rige por los niveles de hormonas reproductivas que aumentan y disminuyen, llevándolas a una verdadera montaña rusa por la vida. Y ninguna etapa puede ser más pronunciada que su paso por la menopausia, que pone fin a su fase reproductiva, y también puede traer efectos secundarios desafortunados que causan estragos en su vida sexual.
En Women’s Healthcare de Princeton, nuestro equipo de mujeres especialistas en salud de la mujer ayuda a nuestros pacientes a navegar por estas diferentes etapas, dándoles las herramientas que necesitan para garantizar la mejor calidad de vida posible. Y cuando se trata de la menopausia, el equipo entiende mejor que la mayoría de los efectos secundarios mentales y físicos de esta transición, ya que nuestros médicos han completado la formación adicional y la certificación de la Sociedad Norteamericana de Menopausia.