Nervio pellizcado en el cuello
La columna vertebral sostiene la cabeza y protege la médula espinal. Es la estructura principal que une la red de nervios de todo el cuerpo. A lo largo de esta red viajan los mensajes que envían las sensaciones, como el dolor, al cerebro.
Los siete huesos superiores de la columna vertebral forman el cuello, y se denominan vértebras cervicales. Los huesos están unidos entre sí por las articulaciones facetarias. Se trata de pequeñas articulaciones entre las vértebras que, junto con los músculos del cuello, permiten mover la cabeza en cualquier dirección.
Entre las vértebras hay discos de cartílago. Los discos actúan como amortiguadores y dan flexibilidad a la columna vertebral. Una hernia discal se produce cuando uno de estos discos se sale ligeramente de su posición natural en la columna vertebral.
Si tiene dolor y rigidez en el cuello que aparecen rápidamente, posiblemente de la noche a la mañana, y tiene dificultad para levantar ambos brazos por encima de la cabeza, podría ser un signo de una enfermedad llamada polimialgia reumática (PMR). Se trata de una enfermedad inflamatoria de los músculos. Es más frecuente en personas mayores de 65 años. Si crees que tienes esta afección, debes acudir a un médico lo antes posible.
Postura de la cabeza hacia delante
El dolor de espalda puede ir desde un dolor leve, sordo y molesto, hasta un dolor persistente, intenso e incapacitante. El dolor de espalda puede restringir la movilidad e interferir con el funcionamiento normal y la calidad de vida. Siempre debe consultar a su médico si tiene un dolor persistente.
El dolor que aparece repentinamente en la espalda o el cuello, debido a una lesión, se considera dolor agudo. El dolor agudo aparece rápidamente y puede desaparecer antes que el dolor crónico de espalda o cuello. Este tipo de dolor no debería durar más de 6 semanas.
Si experimenta dolor de cuello o de espalda, debe acudir al médico para que le haga un examen médico y físico. Es posible que también le haga radiografías de las zonas afectadas, así como una resonancia magnética (MRI). Esto permite una visión más completa. La resonancia magnética también produce imágenes de los tejidos blandos, como los ligamentos, los tendones y los vasos sanguíneos. La resonancia magnética puede conducir a un diagnóstico de infección, tumor, inflamación o presión sobre el nervio. A veces, un análisis de sangre puede ayudar a diagnosticar la artritis, una enfermedad que puede causar dolor de espalda y cuello.
Síntomas de la postura de la cabeza hacia delante
El dolor de cuello se produce cuando la columna vertebral está sometida a tensión por una lesión, una enfermedad, el desgaste o una mala mecánica corporal. El dolor de cuello agudo es un dolor abrupto e intenso que puede irradiarse a la cabeza, los hombros, los brazos o las manos. Suele remitir en días o semanas con reposo, fisioterapia y otras medidas de autocuidado. Usted desempeña un papel importante en el proceso de prevención, tratamiento y recuperación del dolor de cuello. Sin embargo, si es crónico, el dolor persistirá a pesar del tratamiento y necesitará una evaluación adicional.
Figura 1. (vista lateral) La región del cuello se denomina columna cervical. Dentro de los huesos de la columna cervical están protegidos la médula espinal y los nervios. Los siete huesos cervicales (vértebras) están numerados de C1 a C7. Cada hueso está separado y amortiguado por discos amortiguadores. Los nervios espinales pasan por canales óseos para ramificarse hacia el cuello y los brazos.
Los signos y síntomas del dolor de cuello pueden ser rigidez, opresión, dolor, ardor o dolores punzantes, presión u hormigueo. Los músculos pueden sentirse doloridos o tensos en el cuello, la cara o los hombros. Los músculos pueden sufrir espasmos cuando entran en un estado de contracción extrema (por ejemplo, después de un latigazo). El movimiento puede estar restringido: tal vez no pueda girar la cabeza. Si los nervios están afectados, puede aparecer dolor, hormigueo, entumecimiento o debilidad en los hombros, brazos o manos.
Dolor de cuello al girar la cabeza
Se ve en todas partes. En las casas y en las oficinas, mientras se camina por la calle, se va en el autobús o se hace cola. El “cuello tecnológico”, el acto de forzar los músculos al usar teléfonos, tabletas y ordenadores, que provoca dolor de cuello y hombros, rigidez y molestias, es un problema que está empeorando.
El año pasado, los estadounidenses pasaron un promedio diario de 5 horas y 53 minutos con los medios digitales, incluyendo 3 horas, 17 minutos al día en actividades no vocales en dispositivos móviles, un salto de más de una hora desde 2013, según eMarketer.
¿El resultado? Dolores de cabeza, espasmos en el cuello y crujidos en las articulaciones de los hombros, causados por mantener el cuello inmóvil durante mucho tiempo, dice el doctor K. Daniel Riew, director de cirugía de la columna cervical y codirector de cirugía de la columna en el departamento de cirugía ortopédica del NewYork-Presbyterian Och Spine Hospital. Aquí, el Dr. Riew desglosa las causas y los síntomas del cuello técnico y ofrece formas de alinear el cuerpo de forma correcta y segura mientras se utilizan teléfonos móviles, ordenadores y otros dispositivos de medios digitales.