Test de antropofobia
A menudo es normal sentir miedo o tener dudas cuando se va a probar algo nuevo. Puede tratarse de comprometerse en una relación o de involucrarse en situaciones inusuales a las que no está acostumbrado. El miedo es una emoción humana natural que te indica que seas precavido con lo que haces.
Para algunas personas, el miedo las mantiene centradas. Sin embargo, si tienes miedo al fracaso y te impide dar lo mejor de ti mismo, es posible que se haya convertido en una fobia. Tener miedo al fracaso está reconocido universalmente como una fobia. Se define como un sentimiento irracional de miedo a un determinado objeto o situación. ¿Crees que tienes miedo al fracaso? La atiquifobia es real. Pero nunca dejes que te impida ser la mejor versión de ti mismo. Sigue leyendo.
Puede que no todo el mundo lo experimente, pero este tipo de fobia tiene su nivel de gravedad, desde leve hasta extremo. El miedo a fracasar también está relacionado con la ansiedad o el trastorno del estado de ánimo que afecta a la salud mental y a la calidad de vida.
El miedo irracional al fracaso puede estar causado por un acontecimiento traumático que la persona haya vivido anteriormente. Esta experiencia traumática puede hacer que la persona dude de sus capacidades y crea que no es lo suficientemente buena para intentar cosas nuevas. La atiquifobia severa mantiene a la persona restringida dentro de su zona de confort y le impide avanzar en la vida.
Miedo al rechazo en las citas
La atención de los demás es una necesidad humana básica y esencial. La atención en forma de reconocimiento, comprensión y aceptación es esencial para que podamos prosperar tanto psicológica como físicamente. A menudo, este deseo de aceptación va acompañado de un miedo a no recibir comprensión y aceptación, lo que justifica la creación de una estrategia para ocultar nuestro verdadero yo y crear una fuerza motriz que nos impide ser auténticos. El hecho de no recibir suficientemente la experiencia de ser comprendidos, validados, aceptados, considerados y apreciados, tal y como somos, puede conducir a sentimientos de vergüenza e indignidad que luego crean una sensibilidad a tener la sensación de ser rechazados. El deseo de ser aceptado y el miedo al rechazo informan muchas de las acciones en nuestras vidas y la forma en que vivimos e interactuamos.
Cierto grado de rechazo (que puede experimentarse como rechazo) y el rechazo real, de los demás es una parte inevitable de la vida. Sin embargo, el rechazo se vuelve problemático cuando es prolongado o frecuente, cuando la fuente del rechazo es una persona importante en nuestras vidas, o cuando uno ya tiene una sensibilidad particular al rechazo. La persona que experimenta el rechazo puede sentir que se lo ha ganado por algún fallo en su personalidad, o por una deficiencia en sus atributos físicos, o porque no ha podido ser todo lo que se esperaba de ella.
Fobias más comunes
La atención de los demás es una necesidad humana básica y esencial. La atención en forma de reconocimiento, comprensión y aceptación es esencial para que podamos prosperar tanto psicológica como físicamente. A menudo, este deseo de aceptación va acompañado de un miedo a no recibir comprensión y aceptación, lo que justifica la creación de una estrategia para ocultar nuestro verdadero yo y crear una fuerza motriz que nos impide ser auténticos. El hecho de no recibir suficientemente la experiencia de ser comprendidos, validados, aceptados, considerados y apreciados, tal y como somos, puede conducir a sentimientos de vergüenza e indignidad que luego crean una sensibilidad a tener la sensación de ser rechazados. El deseo de ser aceptado y el miedo al rechazo informan muchas de las acciones en nuestras vidas y la forma en que vivimos e interactuamos.
Cierto grado de rechazo (que puede experimentarse como rechazo) y el rechazo real, de los demás es una parte inevitable de la vida. Sin embargo, el rechazo se vuelve problemático cuando es prolongado o frecuente, cuando la fuente del rechazo es una persona importante en nuestras vidas, o cuando uno ya tiene una sensibilidad particular al rechazo. La persona que experimenta el rechazo puede sentir que se lo ha ganado por algún fallo en su personalidad, o por una deficiencia en sus atributos físicos, o porque no ha podido ser todo lo que se esperaba de ella.
Prueba de miedo al rechazo
No importa lo que sea, una cosa está clara, este es un miedo muy debilitante que influye significativamente en tus elecciones, decisiones y acciones diarias. De hecho, mientras estés bajo la influencia de este miedo, harás cosas que normalmente no harías si no tuvieras miedo al rechazo.
Este miedo puede llegar a ser tan debilitante que literalmente no harás o dirás nada que contradiga la opinión de otra persona. Esencialmente te conviertes en un “complaciente de la gente”. O, en otras palabras, haces y dices cosas no porque las creas, sino principalmente porque estar de acuerdo con otra persona reduce la probabilidad de que te rechacen.
Como resultado, acabas copiando la forma de actuar, hablar y vestir de los demás. Puede que incluso adoptes los valores y creencias de otras personas. Por consiguiente, empiezas a vivir esta vida ilusoria que no tiene ninguna base en la realidad.
Por supuesto, no hay nada malo en modelar a otras personas. Lo haces todo el tiempo. De hecho, todo el mundo lo hace todo el tiempo sin pensar ni darse cuenta. Sin embargo, hay una diferencia significativa entre modelar el comportamiento de alguien -en un intento de adoptarlo como propio- y copiar el comportamiento de alguien por miedo al rechazo.